Hace muchos años que las noticias reportan miles de muertos en barcos de fortuna que llevan africanos desesperados para llegar a Europa, poniendo en primer plano el fenómeno humano, convertido en tragedia, de la migración masiva. Ante esa realidad, la rica y capitalista Europa ha cerrado sus puertas a siete llaves. Y hemos dicho que con esa actitud egoísta se niega a hacer frente a las consecuencias de su propia política colonialista en el Continente negro, que sembró de miseria y violencia.
Ahora bien, estas breves líneas están escritas desde la realidad de Nuestramérica, en momentos en los que la brutal política del recién inaugurado segundo gobierno de Trump da cuenta de que pretende deportar un millón y medio de inmigrantes indocumentados por año, y que va a ampliar la base de Guantánamo (que ocupa parte del territorio cubano) para depositar allí a 30 mil de esos expulsados. Mas el hecho de que tal política yanqui no depende de una persona lo demuestra el hecho de que en los gobiernos norteamericanos recientes, Obama había deportado bastante más gente que el primer gobierno de Trump.
Ante la deportación masiva la Presidenta de México ha notado más de una vez que la casi totalidad de los migrantes emigra por necesidad, buscando satisfacer sus ansias de condiciones de vida mínimamente decentes para sí y para sus hijos, y no por gusto.
En ese sentido hay que recordar que desde sus orígenes los grupos humanos, surgidos en África, se fueron extendiendo por la superficie del planeta buscando mejor vida. Y luego esos desplazamientos se volvieron forzados cuando resultaron de guerras inter-humanas, que obligaron a los vencidos o más frágiles a buscar otros horizontes.
Ahora bien, hay que destacar el hecho de que en esas migraciones las que se desplazaron fueron comunidades organizadas, que, incluso en caso de derrota y fuga, protegían con sus estructuras a las personas.
Más tarde el capitalismo traerá una novedad. Al desarticular las comunidades de vida anteriormente existentes, el capitalismo impuso la esclavitud asalariada. Así creó el "trabajador libre" que no dependía de un Señor institucionalmente establecido (como ocurría con el Señor feudal en relación a sus siervos, o con el Inca en relación a sus súbditos), pero que también era "libre" de medios de producción y de vida, por no poseerlos (su poseedor pasó a ser el capitalista), y fue atomizado como entidad individual no protegida por una estructura comunitaria, y obligado a vender su fuerza de trabajo al capitalista, para poder subsistir.
Así la esclavitud asalariada es también el momento histórico de la emergencia masiva del individuo sin ligazones comunitarias.
Y en el capitalismo se inauguran, buscando mejor vida, las migraciones individuales o de grupos familiares o de retazos dispersos de antiguas comunidades destruidas.
Ahí echan sus raíces las caravanas marítimas de miserables que hoy desde África intentan llegar a Europa, y las caravanas terrestres de miserables nuestroamericanos que hoy atraviesan México para intentar llegar a EEUU (donde a costa de mucho trabajo ilegal sin ninguna garantía, sueñan con comprar a medio plazo lo necesario para una vida mínimamente confortable para sí y para sus descendientes… si es que antes no los deportan).
Con la Presidenta de México y yendo más allá de sus dichos hay que poner a la luz el hecho obvio de que ambas migraciones son el resultado del gran fracaso del capitalismo para satisfacer las necesidades básicas de miles de millones de personas a lo largo y ancho del planeta.
En el caso de Nuestramérica ese es el fracaso de los doscientos años de capitalismo supuestamente independiente de los anteriores Imperios coloniales, que llenó los bolsillos de las oligarquías (latifundistas/mineras/industriales/financieras/comerciales) al tiempo en que condenó y condena a la miseria a las mayorías populares, entre las que contamos a los pueblos originarios y afronuestroamericanos, los campesinos, los desplazados del campo que pueblan las periferias urbanas insalubres y violentas, y, aun, por lo menos parte de los obreros y empleados.
Por eso, la solución de esa tragedia humana supone superar el capitalismo. Y esa superación supone a su vez la reconciliación entre la persona y la comunidad, en una nueva relación en la que cada individuo contribuye con sus capacidades a construir un gran Fondo Comunitario Común (desde la comunidad local hasta la Humanidad por entero) a partir del cual cada persona, sin necesidad de migrar, habrá de recibir lo acorde a sus necesidades para desarrollarse como individuo comunitario-universal-cósmico, respetando los equilibrios ecológicos y la interculturalidad. Tal es el contenido del principio rector del Ecomunitarismo que, apoyándose en las tres normas básicas de la Ética, reza: "De cada un@ según sus capacidades y a cada un@ según sus necesidades, respetando los equilibrios ecológicos y la interculturalidad".
Ahora bien, como la primera norma fundamental de la Ética que sienta las bases del Ecomunitarismo nos exige luchar para realizar nuestra libertad individual de decidir, cuando los individuos no se sientan suficientemente contentos con su respectiva vida comunitaria, deben tener la libertad de migrar adonde quieran, para insertarse en nuevas comunidades ecomunitaristas, en las que serán recibidos de brazos abiertos para que allí contribuyan con sus capacidades. [Recordemos que las otras dos normas fundamentales de la Ética nos exigen: a) la segunda, realizar la libertad individual amparada por la primera norma en búsquedas de consensos con l@s demás, y, b) la tercera, preservar-regenerar la salud de la naturaleza humana y no humana].
Y la interrelación entre todas esas comunidades será de solidaridad recíproca, pues en el Ecomunitarismo el Género Humano se constituirá por primera vez como entidad real que cubrirá toda la faz del planeta. La estructura institucional de tal solidaridad será la Organización de los Pueblos Unidos. En la misma, a diferencia de la actual ONU, las decisiones son tomadas por la asamblea general, y no hay países dominantes y con derecho a veto.
Dicho todo lo anterior y por obligación de honestidad intelectual cuando nos referimos a Nuestramérica debemos registrar el hecho de que tampoco Cuba, que hace más de 60 años se propone construir el socialismo, ha podido satisfacer sin sobresaltos hasta el presente algunas de las necesidades básicas (empezando por las alimentarias) de la mayoría de su población. Eso ha llevado a que en los últimos dos años casi un millón de cuban@s (nada menos que casi un 10% de la población total del país), en su mayoría jóvenes y con estudios (gratuitos, ofrecidos por la Revolución) hayan emigrado (se calcula que unos 200 mil de ellos hacia los EEUU). Si esa ola migratoria hace parte de un flujo que nunca cesó desde 1959, tiene sin embargo al parecer algunos rasgos distintivos. Quizá el más importante de ellos es que el actual flujo migratorio se debe al hecho de que una (vasta?) parte de la juventud cubana no cree más que el socialismo que su país intenta construir pueda traerle en un futuro previsible una vida exenta de constantes sobresaltos materiales (aunque dentro de ciertos límites de frugalidad), y por eso apuestan al capitalismo. Unos lo hacen dentro de Cuba, ocupando, si pueden, los nuevos espacios de las empresas privadas-capitalistas autorizadas y protegidas por la nueva Constitución. Y otros buscan establecerse en otros países (capitalistas). Si ello es así Cuba tiene por delante un desafío mucho mayor que el enfrentamiento al criminal Bloqueo yanqui que la asfixia desde el inicio de la Revolución. Se trata de reconquistar a su juventud para un sueño y modo de vida capaz de superar las catástrofes humanas y ambientales inherentes al capitalismo. Y para ello bien pudiera ser una bandera determinante la vida y el pensamiento del Che (corrigiendo y adaptando al presente lo que deba ser corregido y adaptado), pero/y teniendo claro que a esta altura de los acontecimientos ninguna escasez alimentaria básica reiterada y/o duradera es justificable en nombre del Bloqueo. Pues las tierras y las manos están a disposición para garantizar la seguridad alimentaria (a pesar y en contra del Bloqueo).
Por nuestra parte destacamos que el Ecomunitarismo, a la luz de su principio rector, defiende una vida de frugalidad ecológica libremente asumida, pero no acepta ni justifica una vida de permanentes, duraderos e involuntarios sobresaltos materiales (en especial alimentarios). Y tampoco la avalaría el propio Che, quien en su discurso ante la Conferencia de la OEA realizada en Punta del Este, Uruguay, en 1961 (está en youtube con el título "Che Guevara discurso en la conferencia de la OEA, Punta del Este") dijo que mientras los países latinoamericanos anunciaban para 1980 un ingreso neto per cápita de 500 dólares, Cuba proyectaba para ese año un ingreso neto per cápita de 3.000 dólares (en el minuto 16 del video). [También es un documento histórico, que hay que apreciar críticamente por su valor pasado-presente-futuro de cara a lo que cada pueblo de Nuestramérica quiera hacer hoy en perspectiva ecomunitarista, la conferencia esencialmente económica que ese mismo año pronunció el Che en la Universidad de la República, en Montevideo, y que se encuentra en youtube con el título "El Che en Montevideo, 1961"].
Cabe a l@s cuban@s, en libre y amplia deliberación continua, reformular y mejorar su socialismo (ojalá que en perspectiva ecomunitarista) para paliar la crisis material y moral que afecta a (parte de) su juventud, pues tal crisis puede dar al traste con el intento socialista y traer de vuelta al capitalismo más puro y duro.
Si en Nuestramérica cada país logra en un futuro (ojalá que cercano) ir dejando atrás al capitalismo (y Cuba mejora su intento socialista) en la medida en la que avanza rumbo al Ecomunitarismo, cesarán entonces las migraciones masivas, pues la enorme mayoría de las personas encontrará el Buen Vivir en su comunidad de nacimiento (que será solidariamente apoyada por las demás).
Bibliografía mínima
Sirio López Velasco, Decálogo, Manifiesto y Compendio Ecomunitarista (2025), gratuitamente disponible en https://www.editorafi.org/ebook/c054-decalogo-manifiesto-compendio-ecomunitarista
Sirio López Velasco, Filosofía Ecomunitarista Aplicada vol. 2 (2024), disponible gratuitamente en https://doi.org/10.58942/eqs.108
Sirio López Velasco, Filosofía Ecomunitarista Aplicada vol. 1 (2023), disponible gratuitamente en https://www.editorafi.org/ebook/a042-filosofia-ecomunitarista-aplicada
