En un marco social marcado por las protestas que se continúan produciendo en Estados Unidos tras el asesinato del ciudadano afroamericano George Floyd por parte de un policía de Mineápolis, Google ha anunciado que, como medida para combatir el racismo, restringirá los anuncios de viviendas, empleo y crédito que sean discriminatorios al dirigirse únicamente a un grupo de usuarios diferenciados por tipo de categorías.
La compañía ha señalado en un comunicado que para mejorar el acceso a la vivienda, el empleo y las oportunidades de crédito, prohibirá que los anunciantes de dichos sectores excluyan a usuarios basándose en su religión, raza, origen étnico, orientación sexual, nacionalidad, discapacidad o incluso la zona en la que vivan. "Evaluamos y desarrollamos periódicamente nuestras políticas para grantizar que protejan a lo usuarios de comportamientos como la discriminación ilegal", indican desde Mountain View.
Para llevar a cabo dichos cambios, Google, tal y como ha informado en un comunicado el vicepresidente de Gestión deProductos, Privacidad y Seguridad en los Anuncios, Scott Spencer, ha estado trabajando con el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano (HUV, según sus siglas en inglés) de Estados Unidos. "Como parte de nuestro esfuerzo, ofreceremos a los anunciantes de viviendas información adicional para ayudar a garantizar que actúen de una forma en la que apoyen el acceso a las oportunidades de vivienda", ha señalad Spencer.
Asimismo, el responsable del área de anuncios ha indicado que Google seguirá trabajando con el HUV, expertos en derechos civiles y vivienda y la industria publicitaria "para abordar las preocupaciones sobre la discriminación en la orientación publicitaria".
Esta actualización, que cambiará la política de publicidad personalizada de Google, se llevará a cabo por ahora solo en en Estados Unidos y Canadá, a donde el portavoz espera que llegue a finales de este año.