31 de agosto de 2024.- Cientos de conductores de viajes compartidos de Uber y Lyft en Nashville , Tennessee, votaron para iniciar una huelga el viernes 30 de agosto en el aeropuerto internacional de Nashville, advirtiendo de "vacaciones arruinadas" mientras la ciudad se prepara para una ola de turistas que celebran el fin de semana festivo del Día del Trabajo.

El recientemente formado Sindicato de Conductores de Tennessee está tomando medidas para crear conciencia sobre sus demandas de mejoras en sus salarios y condiciones de trabajo.

La huelga en el aeropuerto será seguida por una caravana de conductores de vehículos compartidos por el distrito de entretenimiento Lower Broadway de Nashville, un foco turístico. Tennessee registró un récord de 30.600 millones de dólares en gasto turístico en 2023.

Los trabajadores están presionando para obtener una mejor compensación en medio de acusaciones de que Uber y Lyft pueden quedarse con más del 60 al 80% de la tarifa del viaje. También piden un acceso más amplio a los baños en el aeropuerto de Nashville, límites al uso de patinetes por la noche, un límite en la cantidad de conductores de viajes compartidos permitidos en la carretera y una prohibición para los conductores de otros estados debido a las demoras que pueden enfrentar los conductores para conseguir tarifas.

“La mayoría de los conductores del Sindicato de Conductores de Tennessee (TDU) trabajan 12 horas al día todos los días de la semana en viajes compartidos. Dependen de los viajes compartidos para poder ganarse la vida, y Uber y Lyft son sus únicos ingresos”, dijo el Sindicato de Conductores de Tennessee en un comunicado. “Los conductores se niegan a seguir permitiendo que grandes empresas como Uber y Lyft se beneficien de su trabajo. Quieren que Nashville escuche su lucha. Esta huelga será la primera de más vacaciones arruinadas para los turistas de Nashville. A menos que se cumplan sus demandas, Tennessee y sus turistas pueden esperar más trastornos”.

Un conductor de Uber y Lyft en Nashville durante seis años, que pidió permanecer anónimo por temor a represalias, dijo que él y otros conductores se organizaron juntos debido a las malas condiciones y el trato que, según él, han ido empeorando desde que comenzó a conducir, con tarifas en aumento pero el salario de los conductores disminuyendo.

“Los conductores hacen todo. La gasolina sale de su sueldo, las reparaciones del coche porque es un coche personal, así que si le dan al conductor solo el 45% de la tarifa, eso deja a todos en apuros”, dijo. “En una hora, puedo conducir desde el aeropuerto hasta el centro o desde el centro hasta el aeropuerto y ganar entre 8 y 10 dólares, y luego en otra hora puedo ganar 17 dólares. Necesitamos que el salario sea constante”.

Señaló que los conductores pueden enfrentarse a largas demoras mientras esperan a que lleguen los pasajeros. También afirmó que los conductores de viajes compartidos reciben un trato injusto, ya que se les emiten multas sin previo aviso y no se les proporcionan baños adecuados en el aeropuerto.

“Por eso nos unimos”, añadió el conductor. “Con la situación económica actual, es realmente difícil cubrir las necesidades familiares o lo que se necesita para sobrevivir. Estamos tratando de luchar por nuestros derechos. Tampoco queremos que Uber cobre de más a los pasajeros. Cuando se quedan con el 50 o 60% del precio del viaje, cuentan con que recibamos propinas de los pasajeros, pero por la forma en que estamos pasando las cosas, entendemos que la gente está pasando por dificultades, por lo que no todos dan propina”.