Con este escrito, solo pretendo mencionar mi versión y análisis de los hechos que en la prospera Guayana vienen ocurriendo con los casos de corrupción que se están investigando. Paseando por la ciudad leyendo el diario Primicia, Nueva Prensa y el Correo del Caroní, pude observar la repentina puesta de publicidad exagerada y masiva con vallas grandes el logo y marca El Guayanés; esto me hace afirmar de manera directa que en esta tierra donde el oro, hierro, bauxita y aluminio imponen la agenda política, económica, mediática y social que se inició la guerra de medios para la toma de poder.

   Recientemente fue imputado el Presidente del Diario Primicia, Yamal Mustafá vinculado a supuestos hechos de peculado doloso y concertación de funcionario público con contratista y asociación para delinquir en relación a las investigaciones realizadas en Ferrominera del Orinoco, hecho además de corrido como agua en cauce por las redes sociales; como contraparte el mismo, días antes había interpuesto una demanda (admitida) contra el Presidente del Correo del Caroní, David Natera, un viejo caudillo de la comunicación en el Estado, que desde el mes de Mayo del año corriente viene haciendo eco investigativo a las denuncias interpuesta por el politiquero de oficio Andrés Velásquez sobre el bautizado por los medios nacionales El Cartel del Hierro.

   En esta, mi Guayana querida deberíamos traer sin duda alguna, a editores y productores de History Channel para que hagan un documental Gigantes por los minerales porque si hacemos una retrospectiva sobre la gayapa mediática, todos estos medios han nacido de las raíces, sangre, sudor y pulmón de los minerales de la otrora Angostura, hecho muy similar a los crecimientos de JP Morgan, Carnegie, Rockefeller en su época.

   A continuación la óptica de los medios de comunicación de Guayana y su relación al sector de las empresas básicas:

Correo del Caroní: su dueño, David Natera, remanente del caudillazgo de la 4ta republica que aun queda en el Municipio;  empresario, político que a costilla de contratos otorgados por la CVG amasó su fortuna y posee el medio de comunicación más rancio y contrarrevolucionario de la zona. ¿Cómo logró su poder financiero? Gracias a la bendición otorgada por Sucre Figarella, el Zar de Guayana. Casualmente Natera, era uno de los que cuestionaba, perseguía y gayapeaba a Andrés Velazquez cuando este era Sindicalista; hoy en día comen, beben, bailan y regocijan no en el mismo plato, pero si en los mismos restaurantes.

El Diario de Guayana: Su dueño, Abilio Suárez empresario relacionado a la empresa Casa Blanca, involucrada en la venta literalmente de pacotilla para las filiales de la CVG. Línea de extrema ambigüedad, cuando y no conviene.

Diario Primicia: Su dueño, Yamal Mustafá, empresario dueño de Corpobrica, Credilab, contrataciones con la Gobernación del Estado, empresas filiales de la CVG, actualmente imputado por supuesta vinculación en hechos de corrupción en Ferrominera del Orinoco; se a transformado en un periódico en algunos puntos para sembrar intrigas, otros para mostrar algo más de las noticias realmente típicas, y debes en cuando considerado un panfleto.

Nueva Prensa: su dueño (desde el más allá) Rubén Gamarra, contratista y empresario vinculado al sector privado en levantamiento y construcción en todo el Estado Bolívar; de línea editorial ambigua muy parecida al NY Times, obtuvo un crédito por parte de un Banco del Estado, y por arte de magia se creó el emporio que es hoy en día.

El Guayanés: Vinculado al gobierno local (José Ramón López dixit), típico panfleto informativo institucional, carente de una línea editorial realmente seria.

     Todos estos diarios SIN EXCEPCIÓN han nacido con recursos de la CVG y sus filiales: todos estos obedecen a líneas pagas, a líneas convencieras para lograr su único fin objetivo, tener el control de la empresa que los creó para así hacerse parte y poder de los minerales de nuestra región. Estamos con los casos de corrupción actuales, viendo una guerra no por la limpieza de la institución, sino en la pelea del antiguo cartel (Natera), el supuesto nuevo cartel (Mustafá) y la entrada de un cartel  supuesto emergente (José Ramón López); siendo este ultimo una representación del PSUV, vemos el porqué de los intereses de proyectarse más hacia el Poder Regional. Lo preocupante en sí, es que parte del Gobierno Central busca filtrarse y ponerse del lado político del Gobierno Local que está fortalecido más por populismo y prebenda que por verdadera constancia ideológica, política y compromiso revolucionario.

     Mis recomendaciones para el PSUV y el Gobierno Central, Estadal y Local, no hacerse parte de ese conflicto, dejar el pragmatismo y permitir que la justicia actúe de manera objetiva. Las diferencias internas de poder, cuota y tendencias de una vez por todas discútanla en alto nivel; no podemos negar que hay intereses políticos de por medio, ya que es parte de la real politik, pero deben tomar en cuenta algo y es que en este mundo 2.0, la información vuela y no se puede ocultar, además hay un pueblo arrecho, en parte desilusionado, buscando que las premisas del Comandante sobre la moral y la ética revolucionaria se aplique a cabalidad.

¡Un ciudadano más!