Dentro de todos los logros que nuestro compañero Presidente Chávez Frías alcanzó, quizás uno de los que más le regala alegría.... es el Batallón 51.
Días pasados, me fui al hotel Las Américas, lugar de reunión de este grupo de jóvenes médicos. Se congregaron para charlar sobre metas alcanzadas y para trazar planes de trabajo y tareas a seguir.
La razón de mi visita fue encontrarme con un compatriota, el Dr. Jesús Donatto.
Gracias a él me encontré con un puñado de jóvenes, dispuestos a servir a la patria.
Unos iban, otros venían, abrazos por aquí, saludos por allá, entre risas y camaradería, mantenían charlas de sus experiencias vividas. Mirando a esos muchachos sentí como que mi pecho se hinchaba de emoción, sentí el orgullo de ser partícipe de este proceso revolucionario comandado por el compañero Hugo Chávez.
El compañero Donatto, me narró todos los pormenores de ese patriótico grupo.
En el año 1999, por los convenios con Cuba, viajaron a la isla caribeña, 100 jóvenes bachilleres venezolanos para estudiar medicina, después de 6 años de dura lucha, se graduaron 51 profesionales, por eso su nombre... ahí nació el Batallón 51.
Estos jóvenes Venezolanos, trabajan quizás en los territorios más inhóspitos de nuestro suelo patrio. Los galenos atienden a las comunidades indígenas, como también trabajan en nuestras fronteras. Me contaba el compañero Jesús, que existían zonas indígenas que llevaban más de 40 años que no recibían asistencia médica permanente y otras que jamás tuvieron dicha ayuda. Hoy gracias a estos jóvenes doctores, la tarea se esta cumpliendo.
Junto a su tarea médica también hacen un noble trabajo comunitario, han censado a más de 100 comunidades indígenas, cada comunidad está compuesta de aproximadamente 200 personas, estamos hablando de unos 40.000 o más indígenas atendidos por estos jóvenes doctores.
En enero de este año, se han incorporado 80 nuevos médicos al Batallón 51.
Galenos de toda muestra América, Cuba, Colombia, Panamá, Brasil, Honduras entre otros y mí querido compañero Jesús Donatto de mí querido Uruguay.
Ellos están distribuidos en zonas de difícil acceso, en el Amazonas, Delta Amacuro, Apure, etc. Todos ellos están comandados por la Coronela de la Aviación Eugenia Sader, la cual tuve el orgullo de conocer y la inmensa alegría de estrechar su mano.
Porque gracias a ella y a estos nobles médicos... uno toma una fuerza en su cuerpo que nos hace sentir invencibles. Que feliz se sentiría nuestro Doctor... Nuestro comandante Ernesto Che Guevara, si pudiera verlos. Por eso el título de este artículo (que bien merecido se lo tienen)... ELLOS SON NUESTROS HÉROES ANÓNIMOS.
(La reunión de ayer, fue con mucho sentimiento, muy sentida, por la salud del comandante Fidel. Todos acodaron mandarle un mensaje de pronta mejoría y un saludo por su cumpleaños numero 80. También por resolución de nuestro Presidente Hugo Chávez Frías el comandante Fidel fue nombrado: El líder máximo del Batallón 51.)
Deseo regalar a este grupo de valientes muchachos un poema de un gran poeta venezolano: Gustavo Pereira.
Sobre salvajes
Los pemones de la Gran Sabana llaman al rocío Chiriké Yetakú, que
significa Saliva de las Estrellas; a las lágrimas Enú Parupué, que quiere decir
Guarapo de los Ojos, y al corazón Yewán Enapué: Semilla del Vientre.
Los waraos del delta del Orinoco dicen Mejokoji (El Sol del Pecho) para
nombrar al alma. Para decir amigo dicen Ma Jokaraisa: Mi Otro Corazón.
Y para decir olvidar dicen Emonikitane, que quiere decir perdonar.
Los muy tontos no saben lo que dicen
Para decir tierra dicen madre
Para decir madre dicen ternura
Para decir ternura dicen entrega
Tienen tal confusión de sentimientos
que con toda razón
las buenas gentes que somos
les llamamos salvajes.