Por lo visto y dado que hasta ahora ninguno de los participantes en las huelgas de hambre en Venezuela ha logrado siquiera entrar en la recta final, con yeyos, estado de coma y extremaunción a cargo del cardenal Urosa, uno de ellos optó por coserse los labios.
Demás está decir que dicha costura es un recurso extremo que se hace para arrinconar al gobierno o a cualquier otra entidad que se muestre inconmovible ante los reclamos de algún peticionario.
Cuando el que hace la huelga de hambre no logra convencer a nadie de la autenticidad de su ayuno, coserse los labios es una manera de mostrar que las comilonas de cachitos, hamburguesas y pizzas quedan descartadas debido a la imposibilidad física de ingerir las piezas mencionadas.
En el caso de marras el ciudadano que apareció en televisión parecía tener cosida una pequeña porción de los labios que, partir de la comisura, le cerraba algo así como el 20% de la boca, impidiéndole tomar bocados grandes, pero sin llegar a impedirle el habla, lo cual aprovechó para dar declaraciones a CNN en español y su canal hermanastro, Globovisión.
Según pudimos observar, la costura parcial tampoco le impedirá ingerir comidas blandas y mucho menos usar un pitillo para zamparse sendas raciones de Metrercal, Ensure o cualquier alimento líquido de alto poder nutricional.
Esta circunstancia no le resta mérito al sacrificio del huelguista radical. Coserse los labios pasa a ser una amenaza más en el arsenal de recursos de la oposición para desenmascarar la dictadura de Chávez.
De hecho, resultó conmovedor escuchar al cosido declarando que Chávez es un tirano, lo cual fue transmitido en vivo y en directo por los medios golpistas que intentan derrocar a este régimen despótico y cercenador de la libertad de prensa.
Por mi parte debo manifestar que si el huelguista mencionado sigue sin mostrar síntomas de desnutrición, el próximo paso tendrá que consistir en coserse otra porción del organismo, para que no quede duda de su heroicidad y deseos de inmolarse.
Me refiero a la medida extrema de coserse las nalgas, lo cual de seguro pondrá al gobierno entre la espada y la pared.
augusther@cantv.net