María Corina Machado Parisca, en la vida real con todos los desaguisados de su cabecita hueca y loca, loca de odio racial y de clase, encarna como nadie el mensaje y los modelos del comercial del banco Davivienda de mi país Colombia, que ni da ni presta para vivienda ni nada por el estilo, sino que especula. En el caso de María Corina, siempre la vemos clamando por democracia y defensa de los derechos humanos en el lugar equivocado, hasta maquillada como en Colombia, haciendo alarde de las palizas y persecuciones que jamás ni ella, ni todo el patibulario listado de la MUD, han sufrido.
Por cierto vaya curioso grupo perseguidos políticos , que se dan el tupé de promover progromos, linchamientos, asaltos a embajadas, golpes de estado, agresiones y asesinatos cada vez que pierden elecciones, fuere cual fuere la diferencia en votos, porque en su cabeza, heredera del robo y de la venta del país - como uno de sus ancestros- no hay para nada más, sino para eso que hay en sus genes, en su mente y en su corazón...
Y de lo que abunda en el corazón habla la boca, dice un evangelio. Pero vayamos al grano para reírnos de María Corina Machado, una peligrosa payasa con poder para mover odios nacionales e internacionales, que no en vana es amiga de genocidas y pandilleros internacionales bien vestidos y disfrazados de honradez, como George Bush o John Kerry; y otro kombo de matones como los mayameros de la cuerda de Posada Carriles; con todas sus ramificaciones de organizaciones ejecutoras del terrorismo contra Cuba y asesores eméritos del Plan Cóndor.
Primero fue María Corina a pedir justicia a donde George Bush, a quejarse por la falta de democracia en Venezuela, ante la Casa Blanca y mostrando sus rodillas de ternera huérfana. Imagínense pedirle justicia a un genocida que instauró la tortura con campo de concentración en Abu Grahib y Guantánamo, uno de los campos de exterminio privilegiados de la historia, donde se violan diariamente los derechos humanos, como en los mejores tiempos de Hitler y Mussolini.
Otro día María Corina corrió a Mayami, donde su mentora espiritual, Ileana Ross Lethinen, quien según el periodista Jean Guy Allard, es la representante en el congreso de USA de la mafia terrorista de Miami y una especie de Metternich con faldas, que va a festejar golpes de estado, o apoyar intentonas golpistas fallidas, allí donde el pueblo elige gobiernos independentistas como en Honduras o Ecuador, respectivamente.
La prensa en funciones de propaganda de la nueva entente del siglo XXI, la registra en lugar privilegiado otro día, reunida en Chile con los miembros de la UDI, nada más y nada menos que con los herederos del golpe de estado y el rrrregimen de Augisto Pinochet, la figura más destacada y exitosa del sanguinario Plan Cóndor, el hombre que se hizo famoso por asesinar a sangre fría, a centenares de chilenos, amen de los que ordenó asesinar dentro y fuera de las guarniciones militares, en estadios de fútbol como a Víctor Jara; o hasta en el exterior gracias al maridaje del régimen de Pinochet con la CIA, a través de personajes coordinadores de bombazos, como Michael Townley, golpista de la USA embajada y artífice del asesinato de Orlando Lettelier en Washington DC, según lo muestran los estudios de otra gigante del verdadero periodismo serio: Juliana Stella Calloni, de la argentina.
Precisamente en Argentina se reunió una vez pidiendo democracia, con el grupo de congresistas herederos de la dictadura de Videla y Massera, carnales de Pincohet en el Plan Cóndor, hoy defensores del grupo Clarín, un conglomerado de medios de propaganda al servicio de la SIP y por ende de toda USA misión diplomática en las pampas, grupo mediático aliado de Ruper Murdoch, instigador de las masacres de Iraq y Afganistán.
Es preciso recordar que el grupo Clarín recibió de manos de los dictadores militares, Massera, Videla y su kombo de matones con cuatro soles, el monopolio del papel periódico y la posición dominante para adquirir medios masivos de propaganda radiales, televisivos e impresos, durante la época dorada del terrorismo en el cono sur. Con ellos pidiendo justicia, democracia y respeto a los derechos humanos, posó para las cámaras, taponó micrófonos con sus cacofonías iracundas, esta señora cochera en Abiayala/América de la ultraderecha golpista ligada a Washington.
Luego nuevamente veríamos a esta diva política con un maquillaje envidia de Hollywood para simular una golpiza, y hasta con foto de heroína, luciendo una súbita hinchazón que se le acrecentó una vez pisó Bogotá, así la registraron en primeras planas, El Tiempo, El Espectador y toda la cuerda de los banqueros y élites oligárquicas dueñas de medios, que le tomaron una fotografía agonizante, sin cuidar que al día siguiente aparecería radiante la señora Machado Parisca nada más y nada menos que en el congreso colombiano, invitada por los congresistas de la U, Cambio Radical, el Partido Conservador y su kombo...¿Pero qué hay de malo en que estos grupos la hayan invitado? !Naitica! - dirían los costeños del Cesar y la Guajira.
Pues resulta que esta señora vino a hablar de persecución, golpizas y maltratos ante los miembros de unos partidos, que han aportado el 100% de los congresistas presos por parapolitica, es decir, por haber formado, apoyado y financiado grupos paramilitares, precisamente para matar, perseguir y desterrar a los opositores de izquierda y a los campesinos. Por eso Alexander López del PDA cuando la vio venir, no pudo sino contener su risa, pero no su ironía, cuando le recordó como esos partidos políticos a los que ella venía a pedir apoyo democrático, habían sido los mismos de donde habían surgido los organizadores de los grupos de justicia privada y mafiosa, acusados de asesinar por convicción y encargo.
A esta camada de paramilitares que actuaron como ejecutores o "consultores del sicariato", se les demostró en varios procesos judiciales, haber sido partícipes de la masacre de más de 5000 miembros de la resucitada Unión Patriótica, el más crudo caso de genocidio político en el continente y el mundo, con más muerto que el genocidio de Ruanda, en el cual se halla envuelto como autor intelectual, precisamente el gran mentor, ideólogo y asesor espiritual de la MUD, Álvaro Uribe Vélez, señalado por cuarta vez por otro jefe paramilitar como alias Hernán Sierra, de ser uno de los cabecillas entre los pares sociales en la tenencia de millones y latifundios, de María Corina Machado Parisca...Y eso que no le hago mención de los falsos positivos del señor de las sombras.
Con todo ese recorrido de amigos y carnales que defienden la "democracia", no extraña uno que la señora Machado Parisca, la otra Meternich con faldas de Abiayala/América, se vaya hoy 3 de septiembre de 2013 a El Salvador para reunirse nada más y nada menos, que con ARENA, el partido político fundado por Roberto D'Abuisson, el matón con uniforme que formó los famosos escuadrones de la muerte, que masacraron a centenares de opositores en ese país, incluyendo el asesinato de arzobispos como Arnulfo Romero; o los curas de la misión gringa Mariknoll, cuyas monjas para redondear la canallada fueron violadas, antes de ser pasadas al papayo de la balas. En esos hechos por cierto, estuvo involucrado según Jean Guy Allard el entonces embajador de Venezuela en El Salvador, Leopoldo Castillo- bautizado desde entonces como "matacuras"- y que mal rayo lo parta; por cierto, amigo íntimo de la diputada que mejor supo mostrarle las rodillas a George Bush cuando era presidente.
Dicen que no se puede pedir bendiciones al diablo, ni pedirle al gato que guarde intactas las postas de pescado fresco; pero eso es para personas razonables, no cuenta ni va a ser entendido por una persona como María Corina Machado, que no sólo confunde a la Rusia actual con la Unión Soviética, sino que confunde tiranuelos con demócratas, a genocidas con promotores de derechos humanos; a estafadores bancarios con personas honorables y sobre todo, a paramilitares con defensores de los valores de la democracia. Eso sin embargo, después de hacer la memoria de los viajes, nos permite decir que siempre, María Corina Machado, parece haber sido predestinada, a buscar y estar en el lugar equivocado como el personaje de Davivienda.
