Las ambigüedades del gobierno, sus retrocesos conservadores, más que avances revolucionarios, y su progresivo distanciamiento de "El Programa de La Patria", y el olvido del "Golpe de Timón", lo tienen bailando en un tucero. El gobierno le tiene miedo a la oposición y al Poder Popular que debe encarnar el pueblo. Equivocadamente se queda en las reivindicaciones materiales y no profundiza en la consciencia social del pueblo. Sus movimientos los hace en el marco del sistema capitalista, por esto no podrá vencerlo. Los problemas estructurales que genera el capitalismo son mayores que las respuestas reformistas del gobierno. El gobierno no encuentra otro espacio de lucha política, que el mismo espacio del sistema capitalista. Allí será derrotado. Está centrado en lo electoral. Menos mal que la es oposición verdaderamente mediocre y torpe. Una oposición sin brújula, profundamente dependiente del imperio, fascistoide, sin programa propio, sin visión de país (Neoliberalismo), que lo único que busca es tener el poder para tener dinero.
El gobierno se acerca al pueblo cargado de amarras económicas. No permite el nacer y florecer del verdadero Poder Popular, del autónomo, el que no dependa del gobierno, el que forma el Poder Constituyente, el que es "sujeto histórico" y le dará la pelea al capital. He aquí una clara contradicción de un gobierno acechado por la socialdemocracia, que habla de una revolución socialista, pero no quiere salir del andamiaje capitalista. El gobierno sujeta al pueblo a "sus" Misiones, "sus" Consejos Comunales" y "sus" Comunas, lo bozalea, lo tiene comiendo en su mano. El gobierno está convencido que "su" socialismo saldrá del Estado burgués, del marco de la Economía Política, es decir, del seno del Modo de Producción Capitalista, en términos políticos; del poder constituido. Las falsas teoría "marxistas" de los manuales soviéticos que nos mentían con los fulanos "Modos de Producción", que nos condenaba a seguir paso a paso la vía evolutiva y etapista, hasta que por fin, del seno del capitalismo saldría el socialismo, es la falsa vía que ha demostrada en muchos países su fracaso, y tiene amarrado al gobierno. Hemos olvidado que nuestra llegada al oprobioso capitalismo no fue evolutiva, fue por imposición colonial. No pasamos por una "revolución burguesa", no las impusieron. Seguir la falacia de la "evolución" y el "etapismo" soviético, es creer que una Tigra puede parir un León. La tigra parirá lo que genéticamente sea su continuación. El capitalismo producirá y reproducirá las condiciones que le favorezcan, no puede parir su opuesto.
El gobierno está paranoico, le tiene miedo al pueblo y a la oposición. Está en manos de asesores socialdemócratas, que nos llevarán al infierno neofascista. En Venezuela hoy, el capitalismo está viviendo su tiempo dorado, en particular la banca. Quien lo dude, estudie el reparto presupuestario y el PIB. ¿Con qué parte de la renta petrolera se queda el sector privado? Si al fascismo llegamos, no es porque peligre el capital, sino por la locura infernal de la oposición, la ceguera del gobierno, y la urgente necesidad de materias primas del imperio gringo.
La oposición también le teme al pueblo. Le ofrecen el cielo y le esconden el infierno. Critican al gobierno y de llegar ellos al poder: neoliberalismo puro compadre: achicamiento del Estado, privatización de todas las empresas públicas, liberación de todos los precios, privatización de Pdvsa, sometimiento del ejército a los dictámenes del Pentágono gringo, Miraflores gobernado desde la Embajada Yanqui, entrega de las reservas de dólares y oro, confiscación de todos los medios de comunicación del Estado, privatización de la salud, La educación, el deporte, anulación de ayudas, becas, créditos, viviendas, salida de Venezuela de Mercosur, Alba, Petrocaribe, Celac y la OPEP. Nueva Constitución adaptada a los intereses trasnacionales y al capital nacional, eliminación del nombre de Bolivariana de nuestra Constitución, despidos de trabajadores por miles, represión brutal para liquidar las protestas, en fin, volver al pasado, pero ahora con más decisión del opresor. Lo peor: nos costará miles de muertos. Al igual que la oposición, el gobierno tampoco quiere erradicar el capitalismo, sino administrarlo, "humanizarlo".
La oposición está hábilmente tratando de culpar a Chávez de los errores de Maduro, para borrar de la mente del pueblo, los legados del Comandante. En las colas, las personas dicen: fue un error del gran líder, elegir como sucesor a una persona tan permisiva, ambigua e indecisa como nuestro presidente Maduro. La oposición jura que volverán al poder y no quieren encontrar resistencia, pues como ellos muy bien saben, las medidas que aplicarían serían candela pura, que lanzaría a los pobres arrechos a la calle.
El gobierno está totalmente convencido que el Estado Burgués, la Economía Política y el poder constituido, son LOS ÚNICOS ESPACIOS DE CAMBIO hacia el socialismo. Ignora que el propio Marx, desmintió lo de la historia por etapas, evolucionista, darwiniana y pasiva, aplicable sólo para Europa Occidental. Marx definió un sujeto histórico y con toda claridad advirtió que desde el Estado Burgués, es totalmente imposible construir el socialismo. Más aún, que había que destruir este Estado. ¿Podrá nuestro gobierno por la vía asistencialista o populista eliminar la lucha de clases y la pobreza? Si el capitalismo como sistema se reproduce día y noche, en las mercancías y en nosotros, si controlan la mayoría de los medios de comunicación, si saben muy bien como idiotizar y anestesiar a las personas con la alienación, la enajenación y la ideología, ¿podrá el gobierno derrotar al capital con sus mismas armas? El gobierno no tolera críticas, se ha construido "Su Lecho de Procustro"
La oposición tiene listo su único plan de gobierno: EL PAQUETAZO NEOLIBERAL. Sus bandas de asalto, de choque, y de asesinatos, están haciendo sus prácticas previas. Incitan al bachaqueo, para poner al pueblo contra el pueblo, realizan asesinatos selectivos, toman espacios geográficos, viajan al exterior para pedir dinero, órdenes y entrenamiento. Con los saqueos crean pánico.
El empirismo y el pragmatismo nos están haciendo tanto daño como la corrupción, la inseguridad y la ineficiencia. Sólo el conocimiento científico le pone límites al pragmatismo: demuéstrame científicamente lo que afirmas. "No se puede derrotar al capitalismo con sus armas melladas" El Che.
La oposición entrenada para manejar el miedo, sabe que él es parte del instinto animal que tenemos de la evolución biológica. Saben que el miedo puede paralizar, asustar, movilizar, o inmovilizar, enloquecer o perder el raciocinio. No se trata de un programa nativo, es importado y de vieja data, nos viene del Norte y ya ha sido implementado en varios países, con éxito como en Chile, Ucrania, Yugoslavia o Irak. Están resteados, se jugarán a Rosalinda.
El gobierno usa y tergiversa el pensamiento marxista. Habla de desarrollo de la fuerza productiva y busca como aliado a la burguesía parasita y tradicionalmente importadora, que no dejará de serlo, pero se achicopala, cuando se trata de la "socialización de los medios de producción". Habla de socialismo, pero defiende el Estado liberal burgués. Admite que el mercado es la columna vertebral del capital, pero lo estimula y financia. Insulta a "los pelucones", pero le acepta 56 de las 59 propuestas. Vocifera contra el imperio, pero se reúnen largamente y en varias oportunidades con "el amigo" Shannon. La lucha antiimperialista de Chávez se está debilitando.
El capitalismo sabe chantajear; como disque somos países "atrasados", necesitamos del "progreso" o "desarrollo" capitalista, la nefasta mentira del papel "civilizador" del capital. La oposición sabe que la producción reproduce la dominación. El gobierno llama a la construcción de un aparato productivo privado, que inevitablemente reproducirá todas las características del capital; un sujeto sin identidad, pragmático, individualista, consumista y despolitizado.
El gobierno no ha entendido que no es con el desarrollo de la fuerza productiva solamente, como caminaríamos al socialismo, sino conociendo la etiología y el metabolismo del capital, la dialéctica de sus contradicciones y nuestro glorioso pasado histórico, por esto Chávez se preocupó tanto por la historia. Tenemos que saber el origen de nuestra pobreza, y desde estas instancias crear las condiciones colectivas liberadoras. No es solo con la industrialización, es con la conciencia social de la clase explotada, construyendo su historia. No es convergiendo con el capital, sino enfrentándolo y venciéndolo, la única manera de construir el socialismo. Por sobre el desarrollo de la fuerza productiva, está el desarrollo de la conciencia de clase. El colonialismo parió a las oligarquías y a las burguesías, que hoy apátridas, ayudan a nuestro saqueo.
Marx con su "Modo de producción Asiático" y Mariategui, con su "socialismo indoamericano", nos invitan a repensar nuestro pasado. No se trata de volver al guayuco, se trata de encontrarnos a nosotros mismos y encontrarnos entre todos con la pacha mama. Aún estamos en "la prehistoria de la humanidad", pasemos a la historia humanizada. ¿Acaso el capitalismo es la única alternativa social posible? El capitalismo no es "el fin de la historia", es una creación humana y como tal, está condenada a ser superada. La lucha revolucionaria debe ser fuera de los espacios de dominio del capitalismo. No ir al terreno del capital, traerlo al terreno de la revolución, al del Poder Constituyente.
Debemos descubrir y atacar absolutamente todas las instancias donde el capitalismo se reproduce. La pobreza debe transformarse en vanguardia revolucionaria. La crítica debe ser la sombra permanente que acompañe al nuevo modelo en construcción. Las necesidades comunes deben servir de cohesionadoras sociales. El camino revolucionario es menos escabroso fuera del Estado burgués, fuera del poder constituido y fuera de La Economía Política. Es rupturas y no acuerdos lo que necesitamos.
(NOS LEEREMOS EL PROXIMO SABADO).
