Nunca antes había visto una oposición como la que tenemos en este momento, cuasi desaparecida, o todos están afuera o escondidos, no sé pero en 20 años de oposición es la primera vez que se le añora, sólo Diosdado la saca al aire los días miércoles con el Mazo Dando, pero de resto no se ve, no se siente, la oposición ausente.
Por un lado es bueno porque le damos al país la paz tan anhelada, nada de violencia, nada de guarimbas, ningún asesinado ni quemado, nada de trancas de vías, aunque no son tan necesarias por el problema de transporte, nada de instituciones incendiadas, nada de nada, pero no quita que anden conspirando, que estén ahí tras bastidores con FEDECAMARAS calculando ganancias con eso del bachaqueo y la especulación, o en esa viajadera de entrar y salir con tanta libertad en este régimen comunista.
Esa oposición si dejó a un frente más sutil y radical como los comerciantes corruptos y especuladores, aunque haciendo honor a la verdad es FEDECAMARAS organismo más poderoso que el gobierno porque toda institución que atenta contra la Patria y nadie los toca, qué se puede decir de ellos.
Después de 20 años en una guerra frontal los sectores de la oligarquía sin descanso alguno pareciera que no encuentran más qué hacer para derribar la revolución y en este momento acabar con Nicolás Maduro en el poder. Cosa que se han abocado este último tiempo desde el 4 de septiembre con el magnicidio fallido y ahora con intentonas golpistas vencidas antes de que se ejecuten, pero no nos descuidemos, aunque el Gobierno sabe de una intentona en Octubre algo impactará.
La oposición venezolana implosión como las torres gemelas; ha sido tanta la maldad, tanto los ataques y tato los desafueros que el desprestigio nacional es profundo. Sus mismos seguidores, que aunque por las redes no dicen nada, se siente un rechazo hacia ellos. Tenemos un antichavismo sin liderazgo, frustrado, dependiendo de los gringos en una posible guerra extra fronteras contra la Patria de Bolívar.
Para eso quedaron, arrastrarse a las potencias bélicas soñando con que van a entrar en una noche silenciosa a Miraflores y capturar a Maduro mientras éste duerme, porque eso se lo creen, el problema está es que Nicolás poco duerme, siempre está activo y trabajando.
Los representantes de la oposición, especialmente los diputas de la fallida Asamblea Nacional, deben ser investigados y enjuiciados por los hechos de todas las guarimbas y el magnicidio fallido, dejarse tanta impunidad ya que el ejemplo lo tenemos en Julio Borges que desde su participación en los planes de bombardear Caracas quedó impune.
Es hora que representantes de la oposición rindan cuenta ya, necesitamos que no estén descansando para agarrar fuerza y proseguir en su maldad.
Se busca una oposición con moto propia, honesta, objetiva, patriota, clara e ideológica para el sano debate, la sana confrontación de ideas, investigadora, analítica.
