Y no El Libertador quien, por cierto enseño el camino y el Comandante lo siguió. Es el estado que lleva su nombre. Cuando en Venezuela llueve pueblo y la cosecha ha sido buena, la conciencia de 19 millones de votantes, unos en la izquierda con conocimiento y otros en la derecha sin saber a ciencia cierta que significa en realidad, en estos tiempos, la transición parece ser la plaga mortal que nos acecha. La revolución, en 14 años no ha podido avanzar en cuestiones elementales como la de aumentar sus adeptos a fin de consolidarla, de afianzarla.
En los años de gobierno del Presidente Chávez, en Bolívar, no se perdió una elección en términos cuantitativos y aunque la merma de votos en general, en el país, ha sido algo más contundente, se cayó de un 36% de ventaja en las elecciones del 2006 a apenas, menos de dos, (2) puntos en las de abril del 2014 en la que elegimos al Presidente Maduro.
A pesar de la polarización política entre dos toletes en Venezuela, el triunfo de la revolución bolivariana siempre fue contundente, ya sea en presidenciales, gobernaciones y alcaldía y, eso hoy, en las elecciones municipales, Alcaldes y Concejales, del 8 de diciembre, el panorama que se avizora no es el más alentador. O, en todo caso, el triunfo seria apretado desde el punto de vista de la diferencia de votos, si el elector votara bajo la influencia de los actos electorales últimos pasados.
Pero a esto llama la atención de municipios como Padre Chiem, Roscio y Sifontes y El Callao, donde ese entredicho es manifiestamente adverso y sobretodo en el caso de un ex alcalde que se inscribe por encima de la decisión del partido que es base del gobierno e inmediatamente divide o resta votos a la posibilidad de triunfo y se lo coloca en bandeja de plata al adversario opositor. Esto también sucedió, en elecciones pasadas en la capital del estado y evito que el candidato que repite esa opción, ganara el municipio que ayer le dio 30 mil votos de ventaja al candidato presidencial de la derecha. Es y será un hueso duro de roer en la amplia y atendida godarria bolivarense.
Lo cierto es que de 11 candidatos a Alcaldes y Alcaldesas, solo dos de ellos, Piar y El Callao, no va a la reelección, aun habiendo perdido o disminuido, en cuatro años el legado de votos recibidos, uno va por un segundo tiempo a la conquista de la alcaldía de la capital del estado, una es nueva en la contienda y otro ya fue Alcalde y se lanzo en las elecciones anteriores en contra de la decisión del partido. Solo en política se observan estas conductas y decisiones similares al alcalde a la reelección de Maturín que despotrico hasta del Líder de la Revolución a favor del fugado Gato Briceño y hoy eleva la bandera del Psuv.
También, hay que reconocer el trabajo de los y la alcaldesa de la Gran Sabana, Cedeño y Sucre, quienes, a pesar de ser los más aislados geográficamente, han logrado, con los votos conseguidos, atajar derrotas globales fuertes al Psuv en el estado.
Pero, donde puede tener un efecto negativo la división del electorado revolucionario, es el municipio más poblado y uno de los más importantes del país, Caroni, sobre cuyo candidato se cierne la imposición de la “orden” de no votar por él, por encima del acto propio de votar a conciencia por mantener la revolución en este territorio, amén de que se inscribió un militante del Psuv, contradiciendo las directrices del partido. La guerra de hoy es igual a la que se escenifico en contiendas anteriores entre gobernador y alcalde de esta entidad.
En síntesis, el trabajo productivo del Presidente Hugo Chávez, a quien Dios tiene en la gloria, corre el riesgo de perderse y solo lo salvara el nivel de conciencia de los venezolanos que ayer dejaron de votar por la revolución por las causas que pudieran haber considerado en su momento porque, además, el voto opositor avanza ciego por el camino real. Revolución sin el poder solo existirá en la mente y el concepto propiamente dicho. Es una elección de voto conciencia y no voto castigo. Es una elección donde se dirimen el conocimiento de lo que produce el Socialismo y lo que deja el Capitalismo. Es la decisión a favor de la gente, del que no tiene, del que tiene poco o suficiente, y del que tiene o tiene mucho o, hacia el poder económico, que no tiene nombre pero se le llama banquero, empresario, industrial, ganadero. Corporativo, y hasta bodeguero, la base primera de la pirámide.
Ya nos queda solo ir a votar porque el candidato tiene poco que hacer, u ofrecer, unos, la mayoría tuvieron la oportunidad y lo que hicieron, de una manera u otra, es medible por el pueblo y los nuevos irán cuesta arriba en la búsqueda del triunfo.
La oferta política está en el Plan de la Patria, con puntos y coma y apunta hacia la felicidad de la gente a través de la educación, salud, servicios públicos, transporte, recreación, producción alimentos, desarrollo industrial y creación de puestos de trabajo y una sana administración de los recursos naturales y de los económicos para cuidar el ambiente y la salud ética del país..
El tiempo, las oportunidades y las palabras pasan y no volverán.