Para complicar aún más la vida de trabajadoras y trabajadores, al pueblo en general, el gobernador del Estado Nueva Esparta, Alfredo Díaz, coloca su granito de arena para hundir a nuestra Isla. La última acción, o inacción, fue no presentar, como lo pauta la norma respectiva, el Presupuesto anual por lo que tendrá que “trabajar” con un presupuesto reconducido.
Y es que este gobernador, electo por voto popular ha hecho todo lo contrario, es decir, dedicar su tiempo a hacer todo lo contrario de lo que es gobernar para todo el pueblo neoespartano. Como adeco se ha dedicado a acusar a la dirigencia revolucionará de no dejarlo trabajar, sin embargo, si usted hace un recorrido por algunas ciudades de la isla verá la desidia, como inseguridad, calles y avenidas colapsadas de basura y ausencia de servicios públicos.
Díaz no presentó el Proyecto de Presupuesto en el lapso establecido por la Ley de Presupuesto, y cuando faltaban cuatro días solicitó la prórroga ante el Consejo Legislativo sin los aportes respectivos, ante tal irresponsabilidad los legisladores regionales decidieron negar la solicitud. Ahora tendrá “trabajar” con un presupuesto reconducido, es decir, con los mismos recursos de este año que culmina.
Este mandatario es muy particular. Ante las críticas por su inacción se le ocurrió hacerle la vida más insoportable a nuestro pueblo. Por ejemplo, ordenó no pagarle el salario a trabajadores de la salud, entre ellos a las directoras de los hospitales de Juan Griego y Las Piedras.
Hoy amenaza con demandar al Consejo Legislativo, pero será el pueblo neoespartano quien demande a este dirigente de la vieja política que entre demagogia y corrupción llevaron a la quiebra a nuestra patria.
