No es la primera vez que abordo este tema. Aunque, cada vez más, una sensación de dolor e impotencia afecta mi interioridad. Afortunadamente mis sueños y esperanzas revolucionarias nunca me abandonan.
Un privilegio envidiable es tener un amigo como JL que siempre oirlo o leerlo es una fuente de aprendizaje y de inspiración para la lucha. Comparto sus preocupaciones alrrededor de la 67 reunión anual de la OMS, y me hago eco de sus preocupaciones.
La presidenta actual de la OMS tiene permanentemente un doble discurso. Primero identifica los factores determinantes de los retos para alcanzar la salud, por ejemplo el daño causado por la industria de alimentos, las comidas chatarras de cualquier indole o naturaleza, bebidas, la influencia negativa del sector económico, etc. ( lo que todos los sanitaristas cacarean ), pero sigue y anuncia que la invitada para dar el discurso de orden en la asamblea que comienza mañana es Melinda Gates. Ya en los últimos 3 años han sido los Gates, los oradores de orden, justamente esta familia que son grandes inversionistas en coca cola y mc donald, corresponsables de la obesidad infantil, diábetes, enfermedades cardiovasculares. Lamentablemente es culpa de todos nosotros (unos más que otros), por crear vacios económicos, políticos y éticos en organizaciones como la OMS, dejando espacios abiertos a entidades como las "fundaciones" para que financien la OMS.
En el 2013, esta fundación gates fué la mayor contribuyente de la OMS. Aporto mucho más que el gobierno gringo.
Uno de los temás más álgidos que se discute en el contexto de la "gobernanza" de esta organización para pasar a la resolución del marco de la interacción de la OMS con los "actores no estadales", ongs, sector privado, sector filantrópico y con la academia, por cierto en este sector académico, no se distingue el sector público del privado, por lo que el público quedará excluido de las discuciones normativas e investigativas.
Entre los aspectos más ofensivos está el que se acepte colaboraciones privadas para los salarios y gastos de empleados y asi como para cubrir los costos operacionales de actividades de control y normativas y permitir que personal del sector privado se incorpore a estas actividades.. Tienen el descaro de señalar que dentro de los principios de exclusión solo admiten a las compañias que causan daño a la salud ( ? ), sin embargo no se quiere excluir a aquellas organizaciones cuyas prácticas causan daño a pacientes, médicos y sistemas de salud, concretamente las industrias farmacéuticas que practican el fraude y la corrupción para alcanzar sus objetivos comerciales.
La lucha en el seno de la OMS es como la de David contra Goliath. Por un lado estan algunas voces y voluntades y por otro lado estan los paises desarrollados y sus acólitos y serviles. En pocas palabras, una lucha desigual.
De esta manera estamos sacrificando nuestro futuro haciedonos cada vez más dependientes. Por cierto algunos miembros ( quiero suponer que ahí está la Rep. Bolivariana de Venezuela ) justamente estan resaltando por primera vez en las discusiones el efecto negativo en la salud del sistema económico global.
La verdad es que resultaría grato saber que las autoridades de la salud Venezolanas asumen su condición de revolucionarios y dan la batalla imprescindible, mañana en Ginebra, en vez de dedicarse al cabotaje de teorizar con el virus chikunguya. Vale la pena preguntarse que habría hecho el Doctor Ernesto Guevara de la Serna, médico y especialmente revolucionario integral , si le consultasen sobre este tema.