21 de Enero - Los satélites Starlink están molestando cada vez más a los astrónomos, ya que afecta a la observación espacial y ahora la exploración que usa longitudes intermedias de onda infrarrojas; esto no es nada bueno para la investigación científica.
Actualmente, se encuentran casi 1.000 satélites Starlink orbitando, pero la ambiciosa empresa espera posicionar un total de 42.000 satélites; se desconoce la fecha tentativa pero hasta ahora, la compañía tiene permiso de poner en órbita hasta 12.000 satélites para el año 2027. De hecho, SpaceX tiene programado un lanzamiento el 19 de enero; se lanzarán 60 satélites, donde el cohete impulsor Falcon 9 será lanzado desde el Centro Espacial Kennedy.
La comunidad científica ya había reportado una queja en el 2020, solicitando que los satélites fuesen descartados del plan, debido a la luz que reflejaban los mismos, lo cual significaba un problema bastante serio para la exploración espacial. Debido a los inconvenientes ocurridos, el CEO Elon Musk “solucionó” el problema, ordenando a pintar los satélites con pintura especial oscura, para así evitar la reflexión de luz.
Sin embargo, las quejas por parte de la comunidad científica siguen manifestándose, debido al aumento de la temperatura en los satélites a causa de la capa de pintura, produciendo así dificultades para la exploración que usa longitudes intermedias de ondas infrarrojas.
Las mejoras son evidentes con los satélites más nuevos, denominados como DarkSarts (satélites oscuros en inglés), pero sigue siendo insuficiente, y esto fue confirmado con un reciente estudio. Ahora se espera que los siguientes satélites Starlink operen sin producir más inconvenientes; SpaceX ya los ha señalado como satélites VisorStats.
Por otra parte, los astrónomos sugieren cambiar la órbita de operación de estos satélites, pero esta decisión aún está por verse.
SpaceX guarda buenas expectativas con el lanzamiento de la próxima versión VisorStats (se desconoce la modificación de los mismos).