El golpe de estado en Venezuela es una batalla continuada por parte del imperialismo norteamericano, utilizan todas sus aparato terrorista, mediático, sicológico, económico pero la repuestas del pueblo con su gobierno bolivariano siempre es la defender la patria y su constitución Bolivariana en paz, cada 11 tiene su 13, en esta nueva arremetida la orientación del comandante en jefe Nicolás Maduro es la de antes del 13 el pueblo tendrán su 11, están seguro de la lealtad de un pueblo al legado del comandante Hugo Chávez, esa llama encendida de una patria nueva, hoy tenemos patria, hoy tenemos pueblos y que nadie se equivoquen.
La receta que siempre se escapan a la ultra derecha y aliado imperialista es que a un que llueve, truenen y relampaguee la Fuerza Armada Nacional Bolivariana en su mayoría es profundamente revolucionario y chavista, duélanle a quien le duelan, chillen a quien quiera chilar, son leales a la patria, a la constitución, siempre ante cualquier circunstancia estarán unidas y blindados como un acero con el pueblo, jamás se prestaran a intenciones pinochetistas de la traición a la patria y ante cualquier intento o aventura serán barridos por la fuerza revolucionaria dando paso a otro carácter más radical del proceso, es una revolución pacífica pero armada, tiene capacidad de combate y de conciencia de patria, si el imperialismo y la ultra derecha venezolana creen o prenden que se repitan en el palacio de Miraflores un hecho parecido la del palacio de la Moneda están muy equivocado, ese día serán la derrota definitiva de una célula apátrida nacional con sus aliados imperialista.
Me parece muy necesario traer al debate el libro inédito de aquel patriota revolucionario Venezolano Fabricio Ojeda, “Hacia la Conquista del Poder”, en ella sintetizan la esencia que están siempre en confrontación. En esa obra Fabricio sintetizan una realidad concreta: “Ya dijimos que en Venezuela existen, como en el resto del mundo, dos políticas: una revolucionaria y otra reaccionaria. La primera significa, en nuestro caso, la liberación antiimperialista y antifeudal, el progreso social y el desarrollo económico; la otra, coloniaje, opresión, atraso, tiranía, miseria... “Existen también dos fuerzas: la revolucionaria, patriótica o progresista; y la reaccionaria, conservadora o colonialista. Y en el centro, un denso sector que vacila hacia uno y otro lado y donde también hay revolucionarios y reaccionarios.
Esta apreciación está más viva que nunca en los actuales momentos de la revolución bolivariana, sin duda Venezuela es el centro y pilar fundamental de la liberación e independencia nuestra americana y caribeña, la solidaridad incondicional de la UNASUR, CELAC, ALBA no es nada casual con el gobierno bolivariano presidida por el presidente Nicolás Maduro, los países vecinos están claro que cualquier plan de golpe de estado en Venezuela amenazan la estabilidad de todo un continente, es violentar la democracia verdadera, ese concepto históricamente manipulado por los sectores reaccionarios, para la ultra derecha esta experiencia nuestra americana de la democracia participativa y protagónica concepto practico Chavista siempre fue un peligro y un fantasma que recorren hoy en el mundo, colocan en peligro a su llamado patio trasero por liberarse y aliarse a otras potencia y enemigos históricos, es la concreción del mundo multicentrico y multipolar otro concepto practico chavista que preocupan a cualquier imperio.
Ante cualquier intento de querer quebrantar la democracia y la paz en Venezuela existen una sola garantía y es preciso traer de nuevo a Fabricio Ojeda: “La base antifeudal y antiimperialista de nuestro proceso revolucionario platea un género de alianzas que está por encima del origen del credo político, de la concepción filosófica, de las convicciones religiosas, de la situación económica o profesional y de la afiliación partidista de los venezolanos. El enemigo común su fuerza y su poderío reclaman una lucha unitaria para vencerlo… Son proclives para luchar por la liberación nacional las siguientes fuerzas: los obreros y campesinos, la pequeña burguesía, estudiantes, intelectuales, profesionales, la mayoría de los oficiales, suboficiales, clases y soldados de las fuerzas armadas de aire, mar y tierra”. Antes las nuevas amenazas de la contra revolución la respuesta de nuestro pueblo debe ser la organización, la inteligencia popular, el entrenamiento en manejo de conflictos y fortalecer la alianza cívico-militar participando activamente en los frentes sociales, los colectivos, el gran polo patriótico, PSUV, UBCH, unidos conformando los Comités de Defensa del Poder Popular contra la guerra económica, seguir sumando conscientemente a la Milicia Nacional Bolivariana, formar los Cuerpos Combatientes, las Milicias Obreras, campesinas, indígenas que nos garanticen ejercer la defensa de nuestros espacios comunales, asentamiento, fortalecer la producción nacional como marca en el plan de la patria, transformar la economía parasitaria, las comunas como única experiencia de transición al socialismo, hacer justicia ante cualquier práctica golpista y fascista, vigilar todos los espacio y conquista de la revolución, servicios de salud, transporte y alimentación que seguirán como objetivos y blanco de ataque de la contrarrevolución.
Que viva la Revolución Bolivariana
Que viva la Unión Cívico Militar
Comunas o nada
Independencia o nada
Hoy tenemos patria que nadie se equivoque, hoy tenemos pueblo que nadie se equivoque.
Del Rosario Ignacio Denis. Ingeniero Agroecologico graduado en Instituto Latinoamericano de Agroecologia Paulo Freire (IALA)