El desasosiego del imperio norteamericano no tiene parangón en los últimos tiempos. No se trata ya de evitar la llegada al poder de gobiernos “izquierdistas” o de “simples nacionalistas” críticos a medias del neoliberalismo. No. El imperio ha conseguido en ellos a los mejores amigos. El peligro es otro.
Existe actualmente un recalentamiento político global que empieza a estremecer las bases del imperio. Son las políticas nacionalistas e internacionalistas solidarias de la revolución bolivariana, la dignidad, la moral, y la firmeza en las denuncia frente la intromisión imperial en el mundo, en fin, el “Mal ejemplo”, los que han provocado un verdadero recalentamiento global, que, de establecerse un protocolo para ello, el imperio, esta vez EE.UU. sí estarían dispuesto a firmar.
En Latinoamérica, el “Mal Ejemplo” (calificativo atribuido por el imperio) históricamente lo ha representado Cuba revolucionaria. Hoy Venezuela, Bolivia y otros se suman a esa lista.
Es conocido por todos, las políticas nacionalistas emprendidas por el nuevo gobierno de Bolivia en el sector de los hidrocarburos, ellas le permitirán la recuperación de un 82% de ingresos adicionales al fisco. YPFB y Enarsa empresas Argentina- firman acuerdos en conjunto (empresas mixtas) para la exploración y explotación del gas. Argelia modifica su Ley de apertura del sector de los hidrocarburos al régimen de empresas mixtas similar al modelo Venezuela. Las corrientes progresistas de ecuador pregonan la nacionalización del sector, y el Estado ruso retoma el control del sector, etc.
Por otro lado “El Buen ejemplo” del imperio y sus lacayos han provocado otro tipo de recalentamiento positivo. Veamos. Las políticas belicistas han provocado auge en los precios del petróleo que no solo ha beneficiado a los países productores. Recientemente el EUROPA PRESS. NUEYA YORK, de fecha 26 Octubre 2006, publicó la siguiente información: “La petrolera norteamericana Exxon Mobil ganó 10.490 millones de dólares (8.281 millones de euros) en el tercer trimestre, un 5,7% más que en el mismo periodo del ejercicio precedente”. Otra información, esta vez por Rebelión.Org aparecida en fecha 25 Octubre 2006, dice lo siguiente: “Fue un trimestre excepcional para Halliburton, aseguró el presidente de la compañía, Dave Lesar”. La especulación de los mercados y la guerra son un buen negocio para el imperio.
Las petroleras transnacionales privadas y el Estado imperial muerden sus dientes ante el nuevo mapa político internacional que les augura grandes oleajes nacionalistas. A la vez que ven aflorar también sus contradicciones en políticas domesticas a raíz de los altos costos de los combustibles fósiles. Urge al imperio borrar el “Mal ejemplo” para evitar su influencia moralizante.
