El Otoño de Donald Trump, sangre en puerta

Mientras brindaban por el año nuevo, al comienzo del invierno del 2020, Donald Trump y su equipo basados en su habitual agresividad para el ejercicio de la política, daban por descontado su triunfo electoral en el otoño del 2020, era un hecho, el partido demócrata golpeado, sin un liderazgo convincente, a excepción de las propuestas novedosas y sociales del añejo Bernie Sanders, pero a quien Trump le tenía preparada una estrategia mediática anticomunista que siempre ha dado resultados, estaban cómodos, corrían solos for President.

En diciembre 2019 hubo un rumor, pero ocupados con los regalos y las compras decembrinas nadie le prestó atención, en febrero 2020 el rumor era una realidad y la WHO (Organización Mundial de la Salud) definió, la gripecita que andaba en el lejano oriente, en Wuhan como una Pandemia y recomendó un período de cuarentena y todas las previsiones sanitarias para evitar su expansión, Trump y otros líderes del status quo mundial, de la derecha, del capital, pensaron que con una repuesta política sería suficiente, un par de tweets desacreditando a la WHO y todo continuará igual.

Las predicciones de Trump al norte, no se cumplieron, la pandemia al inicio se reflejó con mucha fuerza y con muchas bajas en el continente europeo, España, Italia y el Reino Unido prendieron las alarmas y pusieron los muertos, hasta el primer ministro inglés Boris Jonhson fue recluido en la uci, la cuestión era seria, mientras tanto Trump seguía en la suya, tratando de jugar al papá médico, en contra del uso del tapabocas, recomendando el uso de lejía, los meses le dieron la razón al sentido común y en semanas Estados Unidos se ganaba la medalla de oro de los casos de coronavirus que ya frisan los 15 millones y Estados Unidos con 4 millones está en el tope de la lista, mientras eso sucede, la buena estrella de Trump se viene en picada, los demócratas con su peor candidato le tienen una ventaja de 10 a 20 puntos, el inicio de campaña en Tulsa fue un fracaso total, si a eso le agregamos la insurgencia de los afroamericanos, que han sabido nuclear a su alrededor más allá de su raza, a un gran conglomerado, que se manifestó inclusive en Europa con manifestaciones multitudinarias en contra de las políticas esclavistas e inhumanas del stablisment norteamericano, que inclusive un deporte de mayorías como lo es el futbol en Europa mostró su solidaridad con Black lives matter incluyendo esta leyenda en las camisetas de los jugadores de la liga premier, de la liga italiana y de las ligas de futbol en general, si le añadimos que en encuestas recientes el índice de aprobación del presidente estadounidense, Donald Trump, alcanzó un mínimo histórico del 45 %. Otra encuesta realizada por el CNBC-Change Research, entrevistó a 1.258 probables votantes de las elecciones generales en todo el país y 4.322 en los seis estados claves, Arizona, Florida, Michigan, Carolina del Norte, Pensilvania y Wisconsin, donde el 45 % aprobó el trabajo de Trump y el 55 % lo desaprobó, según el sondeo, el 59% de los encuestados considera que la pandemia de COVID-19 está empeorando, un aumento de cuatro puntos porcentuales en comparación con hace dos semanas. Con respecto a la pandemia, el 54 % de los electores en esos seis estados cree que el ex vicepresidente estadounidense Joe Biden y los demócratas harían un mejor trabajo, en comparación con el 46 % que apuesta por Trump y los republicanos, este coctel pandemia, black lives matters le ha infligido a Trump una borrachera de soledad y le vaticina una derrota en el próximo otoño.

Un ser con las características de Trump, ante la inminente derrota, Qué tratará de hacer? acá viene el peligro, la prepotencia, la creencia de la superioridad de su raza, su manera de jugar a todo o nada, lo hacen peligroso y Trump sabe que la única forma de superar esos 15 puntos es con sangre, matando gente, matando comunistas, procedimiento que en los Estados Unidos ha funcionado con anterioridad, y acá es donde veo el peligro para naciones como Venezuela y Nicaragua, si fueron capaces de lanzar dos bombas atómicas sobre ciudades japonesas indefensas, en el verano del 45, si fueron capaces de invadir Panamá en vísperas de la navidad del 80, si acabaron con los vestigios de la gran cultura iraquí, si asesinaron a más de 600.000 iraquíes basados en una mentira, que les va a costar invadir Nicaragua o Venezuela como trampolín electoral y asegurarse la victoria de noviembre.

En Colombia el máximo tribunal de Justicia dictaminó que las tropas gringas del comando sur que arribaron a suelo colombiano para realizar maniobras militares contra el "narcotráfico" deben abandonar el país, ahora está por verse si Duque y Trump obedecen esta orden judicial, en otro orden el barco destructor USS Pinckney armado con misiles nucleares, desafió el "excesivo reclamo" (según los gringos) de Venezuela en aguas internacionales durante una exitosa operación de "libertad de navegación" en el mar Caribe, esto sin duda alguna es una nueva provocación del gobierno de Trump. Mientras ellos aprietan, nosotros luchando contra la pandemia, con uno de nuestros jefes aislado por razón del covid19 (Diosdado Cabello), en planes electorales, con los impedimentos del bloqueo. El otoño de Trump pudiera estar pintado de muertes y debemos evitarlo, una manera de evitar es mostrar los dientes con los cuales se cuenta y pedir apoyo de los países amigos de Venezuela, así como ellos se inventan ejercicios militares, pudiéramos llamar a las fuerzas militares amigas, China, Rusia, Irán, Siria y la República Popular de Corea a realizar ejercicios militares por la Paz durante los meses de septiembre y octubre, llamar desde ya a la solidaridad internacional, activar a los gobiernos amigos, a los partidos políticos y movimientos sociales a nivel global amigos, de esta manera desanimar a Trump de ejecutar lo que está pensando y que espere en paz a su derrota de noviembre.



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Jesús Borges


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