Después de 10 años EE.UU. , designa a James Story como embajador en Venezuela. Esto reviste una gran importancia desde el punto de vista político, diplomático y económico para ambos países, porque se rigen por las leyes internacionales y a la vez para que puedan producirse el diálogo entre dos países, así tengan posiciones o sistemas diferentes, eso sí guardando el debido respeto de igualdad, independencia y soberanía, sin intervencionismo.
Aunque son condiciones difíciles de cumplir por parte de ese país, que se ha convertido en el mayor violador de pactos, acuerdos y leyes internacionales.
Donde hay una embajada de EE.UU. , hay golpes militares, dictaduras, asesinatos de presidentes, crímenes y pare de contar. Por eso nos parece altamente sospechoso que nos manden ese ¨regalito¨ en vísperas de unas elecciones tan importantes.
Le recomendamos al presidente Maduro que considere la posibilidad de otorgarle sus credenciales, después del proceso electoral.
Hay un refrán popular que dice ¨ el que está picado de culebra cualquier bejuco lo asusta¨ y este es un bejuco enorme, de grandes dimensiones.
Mientras tanto el proceso electoral en Venezuela avanza sin contratiempos y con más de quince auditorias por expertos en la materia y con dos simulacros electorales.
Ahora Trump culpa a Cuba de su derrota y a Venezuela por haberse confabulado con la fábrica estadounidense, que son máquinas Chavistas.
