Marco Rubio, secretario de Estado de EEUU y quien se presentaba como defensor de la migración venezolana, fue quien recomendó eliminar el Estatus de Protección Temporal (TPS) para los connacionales.
El cambio de opinión quedó reflejado en una carta que remitió en enero pasado a la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem. “Designar a Venezuela bajo el TPS no defiende los intereses fundamentales de Estados Unidos ni prioriza a Estados Unidos y a sus ciudadanos. Por lo tanto, es contrario a la política exterior y al interés nacional de Estados Unidos”, escribió el alto funcionario.
En otro párrafo de la carta hecha pública, Rubio anuncia que el Departamento de Estado “no realizará ninguna actividad que facilite o fomente la migración masiva”.
La comunicación de Rubio trascendió debido a que fue empleada por el Gobierno de Donald Trump, para apelar una sentencia que suspendió la eliminación del TPS, mecanismo que afecta a 117.000 venezolanos residenciados en EEUU.
Medios de comunicación estadounidenses califican la misiva como “un cambio radical para Rubio, quien durante años apoyó el TPS para los venezolanos, incluso cuando era senador estadounidense durante la administración de Biden”.
Trump busca revertir la decisión del juez federal Edward Chen, de San Francisco, quien el pasado 31 de marzo -justo dos meses después de la carta de Rubio a Noem- bloqueó la orden gubernamental de retirar ese programa que protege a sus beneficiarios de ser deportados.
Los medios recordaron que en 2019 el actual Secretario de Estado fue el único republicano que patrocinó una Ley de TPS para los ciudadanos de Venezuela y dos años después, cuando finalmente éstos fueron incluidos en este programa por Biden, Rubio lo celebró.