El jueves 20 de agosto de 2015, en cadena nacional de radio y televisión, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela Nicolás Maduro, anunció al país la aprobación de una solicitud de recursos al ministro de salud para la adquisición de la vacuna contra el Virus del Papiloma Humano -VPH- y su incorporación al Programa Nacional Ampliado de Inmunizaciones 2016. En total, el Estado invierte 281 millones 971 mil Bolívares, equivalentes a 44 millones 757 mil 346 dólares, para su adquisición, compra y distribución.
El escenario plantea una contradicción. Según voceras del gobierno nacional, la vacuna contribuiría a disminuir la incidencia de cáncer de cuello uterino [1]. Sin embargo, alrededor de todo el mundo las víctimas de la vacuna (familiares de niñas muertas y mujeres afectadas) se han organizado en una campaña contraria a su aplicación por parte de los Estados.
Una de las detractoras de la vacuna es la médico, feminista y monja española Teresa Forcades i Vila, que explica a través de diferentes intervenciones cómo las farmacéuticas llevan adelante una operación de todo tipo para que los Estados compren la publicitada vacuna, siendo que sus efectos benéficos no se han podido comprobar, porque entre otras cosas, el cáncer de cuello de útero tarda de 20 a 40 años en desarrollarse y “a día de hoy no se puede saber si las vacunas del VPH son capaces de prevenir el cáncer de cuello de útero; para saberlo, habrá que esperarse hasta los años 2026-2046” [2].
En países como Francia, España, Estados Unidos, India y Japón adelantan grandes movimientos de oposición a la vacuna e incluso establecieron indemnizaciones a las víctimas [3].
Pero ¿qué ocurre con Venezuela? En nuestro país, el farmacéutico y profesor universitario Eduardo Samán lleva adelante una cruzada por enterar al gobierno y a la ciudadanía de los efectos adversos. Recordemos que Samán salió de cargos públicos debido a presiones de grupos asociados a las transnacionales farmacéuticas en Venezuela [4].
Para saber más, conversamos con él:
-¿Cómo llega esa vacuna a Venezuela y por qué?
-Los laboratorios dueños de las vacunas vienen, hace varios años, ejerciendo un “lobby” sobre, médicos particulares, sociedades científicas, entres del gobierno como el Ministerio de Salud y Ministerio de la Mujer y medios de comunicación privados y públicos para convencernos de la necesidad de la vacuna para supuestamente prevenir el cáncer de cuello uterino.
La vacuna entraba ilegalmente al país y era aplicada de forma privada por algunos médicos, convencidos que estaban haciéndole un bien a sus pacientes. Sobre el estatus del registro sanitario no se sabe nada, tanto los laboratorios titulares de las vacunas como la autoridad sanitaria guardaron, y aún guardan, total hermetismo sobre las solicitudes de registro que llevan mas de cinco años.
-¿Es necesaria?
-Muchos expertos independientes, que no tienen vínculos o no están influenciados por la industria multinacional farmacéutica, opinan que no solo es innecesaria sino inefectiva e insegura.
Hay innumerables artículos científicos que sostienen que el virus del papiloma es necesario para la mutación de las células epiteliales del cuello uterino, pero no es causa suficiente para provocar cáncer. También que la mayoría de infecciones por el VPH son transitorias, no llevan al cáncer de cuello uterino, debe estar presente una infección persistente con una cepa de alto riesgo. Se calcula que hasta el 90 % de las infecciones se resuelven solas en un periodo de dos a cinco años y que sólo una proporción de aquellas que no se resuelven progresa a cáncer en los siguientes 20 a 40 años y por último, la mayoría de mujeres con infecciones persistentes con cepas de alto riesgo no desarrolla el cáncer.
La vacuna promete proteger del contagio sólo de cuatro cepas de las veinte que podrían producir cáncer y su eficacia para la prevención del cáncer del cuello uterino no ha sido probada, las pruebas son muy débiles, se requieren por lo menos 20 años para probarlo.
-¿Cuáles son los peligros de aplicar la vacuna?
-Va desde una larga lista de reacciones secundarias o efectos adversos reconocidos por los propios fabricantes de la vacuna, como otros no reconocidos que han aparecido en miles de niñas en todo el mundo, en algunos casos se asocian con muerte.
La mayoría se ha presentado en Colombia, donde aún no se ha determinado el número de niñas, cuya situación inmunológica y neurológica se encuentra comprometida después de la aplicación de la vacuna contra el VPH.
También se han reportado efectos adversos graves asociados a la vacuna, como la desmielinización de los nervios, amenorrea, falla ovárica y diagnósticos de enfermedad autoinmune como el síndrome ASIA (Síndrome autoinmune/inflamatorio inducido por adyuvantes).
-¿Quiénes mercadean la vacuna?
-Una cuyo marca es CERVARIX la produce el laboratorio inglés Glaxo Smith Kline y la segunda llamada GARDASIL la vende la norteamericana Merck Sharp & Dohme.
-¿No es Merck quién fue señalado por fraude con divisas al Estado venezolano, en agosto de 2014?
-Efectivamente, el diputado Pedro Carreño, presidente de la Comisión de Contraloría de la Asamblea Nacional, en el programa de Vladimir Villegas, anunció que consignarán ante la comisión presidencial designada para el seguimiento a la asignación de divisas una serie de irregularidades detectadas con dólares aprobados para la importación de medicamentos. Nombró en esa oportunidad a Abbott, Bayer y Merck. Que paradoja ¡Comenzamos investigándolos y terminaron vendiéndonos la vacuna!
-¿Existe un método clínico para tratar el VPH?
-El VPH es un virus muy antiguo, ha acompañado a los seres humanos desde sus comienzos, tiene como 200 cepas y su gran mayoría son inofensivas, como te dije anteriormente, la mayoría de las infecciones desaparecen solas sin ningún tratamiento. Los médicos tratan, las lesiones, las queman, con ácido tricloro acético o con métodos criogénicos (con frió). Sin embargo, el cáncer de cuello uterino se puede prevenir, de hecho es lo mas efectivo, haciendo controles ginecológicos periódicos y las respectivas citologías para la detección temprana y tratamiento convencional.
-¿Es un negocio para el Estado comprar esta vacuna? ¿O para la empresa privada?
-El negocio es para la empresa privada, una sola dosis de Gardasil Europa cuesta 120 euros, en Colombia 150.000 pesos equivalente a 50 dólares y en Venezuela se vende ilegalmente por MercadoLibre.com en 85.800 Bs cada una y el esquema requiere de tres dosis.
-¿De cuánto dinero estaríamos hablando?
-Se aprobaron exactamente, como lo anunció el presidente, 44 millones 757 mil dólares, para comprar las vacunas del programa ampliado de inmunización (PAI), la del VPH va consumir la gran parte de esta cifra, ya que el resto son baratas. Es la cifra mas grande que hemos gastado en vacunas en nuestra historia, recuerdo que el ministro Rotondaro que introdujo la vacuna de la gripe gastó aproximadamente 25 millones de dólares y Francisco Armada con la vacuna Anti-Neumocóccica unos 6 millones de dólares.
-¿Es un hecho o puede revocarse esta decisión?
-Puede revocarse, si abrimos el debate a nivel nacional, revisamos las experiencias de Colombia, México, Japón, entre otros con la vacuna, conocemos las víctimas de los efectos adversos de la vacuna y por último si el presidente Nicolás Maduro hace efectiva la consigna “mandar obedeciendo al pueblo”.
Amplíe:
[2] En: http://www.elcaminorubi.com/
[3] En: http://caracol.com.co/radio/
[4] En: http://www.aporrea.org/
