Ya han transcurrido 32 días de la desaparición en Mérida de Alcedo Mora, dirigente revolucionario y activista político quien horas antes de su desaparición envió mensaje de texto donde entre otras cosas dijo “…tengo requisitoria de orden de captura por el SEBIN, se me quiere involucrar en unos recuperos, la cosa es complicada, es parte donde se me quiere cobrar por unas denuncias de corrupción a PDVSA que he venido haciendo y me quieren montar una olla…”
A pesar de los esfuerzos de familiares y amigos cercanos por dar con el paradero de Alcedo Mora, hasta la fecha se desconoce su paradero así como el estado en que se encuentra; según parece, además de Alcedo Mora permanecen desaparecidas en circunstancias similares otras dos personas
Hasta el día de hoy no ha habido pronunciamiento oficial sobre este caso por parte de la Fiscal General Luisa Ortega Díaz, ni el Defensor del Pueblo Tarek Williams Saab, ni del Gobernador de Mérida Alexis Ramírez, ni de ninguna otra autoridad que represente al Estado Venezolano.
Es inevitable sospechar que la “extraña desaparición” de Alcedo guarde relación directa con lo que él mismo, pocas horas antes del hecho, alertó. Lo que nos negamos a suponer es que se esté violentando el estado de derecho prescrito en la Constitución Nacional y se estén aplicando prácticas parapoliciales como la de “desaparición forzosa de personas” comunes en el pasado cuarto republicano.
La derecha ha acusado al gobierno venezolano, sin fundamento alguno, de violar los derechos humanos de Leopoldo López, de Antonio Ledezma y de otros tantos guarimberos que en el 2014 promovieron la opción de la violencia, que dejó 43 personas asesinadas, como vía para derrocar al gobierno legítimo de Nicolás Maduro; pero ni pío dirá de la desaparición de Alcedo Mora, caso en el cual si estamos frente a la violación de los derechos humanos de Alcedo.
Toca a los revolucionarios de Venezuela y del mundo incorporarse al frente para denunciar la desaparición de Alcedo y exigir que aparezca de inmediato este camarada a quien en el pasado le tocó enfrentar al estado burgués asesino y criminal de la cuartarepública y hoy está siendo víctima de nuevo de la rémora de ese mismo estado burgués que no termina de morir para que nazca y florezca lo nuevo, como diría el Comandante Chávez citando a Gramsci.
