23-01-17.-El nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se vio obligado a entregar su teléfono personal, un Samsung Galaxy, al Servicio Secreto, como medida de seguridad ante su asunción al poder.
Según The New York Times, el Servicio Secreto le entregó al republicano un teléfono encriptado y un nuevo número, desde el que ya empezó a tuitear, una de sus actividades favoritas. “La razón oficial es la seguridad”, detalló el periódico en un extenso artículo.
Donald Trump es un asiduo tuitero y, pese a que su equipo suele publicar por él, muchos de los tuits más ácidos han sido escritos directamente por él.
Poco después de haber sido elegido presidente, el magnate expresó su preocupación de quedarse “aislado” cuando le quiten su teléfono personal como parte de su transición a la Casa Blanca.
Sin embargo, en ese momento aseguró que seguirá tuiteando de todos modos y, como se ha podido comprobar hoy, ha cumplido su palabra.
