Las empresas básicas del sector aluminio siguen siendo uno de los principales frentes de ataques por parte de los sectores adversos a la Revolución Bolivariana. Y si bien es cierto que actualmente transcurre una coyuntura que ha sido caracterizada perfectamente por el Presidente Nicolás Maduro como una “Guerra Económica”, también es cierto que el tema de las industrias de Guayana no ha dejado de estar inmerso en el contexto económico del país, mucho más cuando se está planteando que las mismas contribuyan a dejar de depender del rentismo petrolero que tanto mal le ha hecho a Venezuela.
Es así como la tendencia reaccionaria que hace vida en Guayana y que día a día nos ha tocado ver su mimetización en espacios que son de la Revolución y de la Clase Trabajadora, hoy centra sus ataques en la empresa CVG Carbonorca, la principal empresa productora de Ánodos de Carbón que son necesarios para el proceso del Aluminio. Si bien la situación de esta empresa desde hace 4 años aproximadamente, ha sido inestable y ha generado un clima laboral hostil, actualmente se viene registrando un incremento significativo en la producción de CVG Carbonorca durante este año, la cual ha registrado hasta la fecha alrededor de 45 mil toneladas de Ánodos de Carbón, lo que se ha traducido con mejoras significativas tanto para los trabajadores de Carbonorca, así como para la economía nacional que también recibirá mayores ingresos además del percibido por la industria petrolera.
Sin embargo, hoy podemos ver a personajes como Hernán Pacheco, quien es Director Laboral de CVG Carbonorca y que en reiteradas oportunidades ha intentado coquetear con el Gobierno Nacional y asumirse como “Revolucionario”, pero que en su práctica ha planteado insistentes ataques en contra de la Revolución y jugado un papel determinante como miembro del Colectivo “Alfredo Maneiro”, que lejos de reivindicar el carácter profundamente obrerista y socialista de Maneiro, solo ha deshonrado su lucha. Prueba de ello son los constantes ataques a la Junta Directiva de CVG Carbonorca, así como su profundo cuestionamiento al Control Obrero y al Plan Guayana Socialista como herramientas de construcción de las nuevas relaciones de producción y de Planificación de los procesos productivos.
Cabe recordar que Hernán Pacheco fungió como Secretario General de Sutracarbonorca desde 2004 hasta 2008, siendo parte del Movimiento Matanceros. Todos saben que Pacheco tiene fuertes vínculos con las Causa-R y pareciera que en los últimos años ha asumido posiciones más retrogradas y reaccionarias bajo la excusa de luchar por beneficios para los trabajadores. Es importante recordar que en Febrero de 2011, ya como director laboral de CVG Carbonorca consideró que “el Gobierno no esta aplicando el mejor plan para el desarrollo sustentable de Guayana, ya que el actual Control Obrero no le brinda oportunidades de participación a todo el colectivo de trabajadores”. Evidentemente, Pacheco reivindica el viejo esquema sindicalista agotado y que solo ha servido para beneficiar a una pequeña mafia de dirigentes a costilla de la clase trabajadora de Guayana.
Pero además de fustigar al Control Obrero y al Plan Guayana Socialista, Hernán Pacheco se ha convertido en uno de los principales operadores políticos en contra de la Junta Directiva de CVG Carbonorca, cosa que no ha hecho ni si quiera el propio Emilio Campos quien es el actual Secretario General de Sutracarbonorca y militante activo y confeso de la Causa-R y la tendencia sindical de la MUD de Guayana. Tal es así que desde principios de 2013 el Colectivo “Alfredo Maneiro” con Pacheco al frente introdujeron nueve casos a investigar en la Asamblea Nacional por presuntas irregularidades administrativas y omisión de procesos licitatorios en Carbonorca, entre los que se encuentran el plan de normalización de la empresa para el período 2007-2010, el sobreprecio en la compra de juguetes en 2010 e insumos para la unidad de operaciones.
Es de recordar que en Octubre de este año el presidente de CVG Carbonorca, Juan José Méndez, y 11 miembros de la productora de ánodos de carbón comparecieron ante la subcomisión de Contraloría de la Asamblea Nacional, coordinada por la diputada del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Nancy Ascencio. En la reunión se abordó el presupuesto para el mantenimiento de los hornos de cocción, presuntamente ejecutado con sobreprecio, al tiempo que se solicitó para su análisis los soportes de cada uno de los procedimientos, en total nueve denuncias recibidas por la comisión, los cuales serán examinados antes de tomar una decisión. No obstante, y a pesar de que las investigaciones continúan, pareciera no haber indicios reales de estas denuncias.
Ahora bien, ¿Qué es lo que busca con estas acciones Hernán Pacheco?, sencillamente se trata de un plan para frenar el empuje financiero y productivo que en los últimos meses se han logrado en CVG Carbonorca gracias a las inversiones y recursos que ha garantizado el Gobierno Bolivariano, lo cual ha repercutido en otras empresas del sector aluminio como es el caso de CVG Alcasa y CVG Venalum, las cuales ahora reciben a tiempo los ánodos de carbón que son indispensables para el proceso de reducción de aluminio. Para nadie es un secreto que Guayana es el epicentro de una conspiración por parte de grupos de poder político y económico que con la ayuda comprobada del imperialismo norteamericano (recordar los casos en que se han reunido funcionarios de la embajada estadounidense en Ciudad Guayana), así como las reiterativas visitas sin justificación alguna del líder de la derecha venezolana y Gobernador de Miranda, Henríque Capriles Radonski, al estado Bolívar.
Otro factor que moviliza a Hernán Pacheco a atacar a la directiva de CVG Carbonorca es el hecho de proyectar su imagen pensando en las próximas elecciones sindicales, pues sabe que con el control del sindicato puede además de manejar recursos, dirigir con más fuerzas sus ataques hacia la empresa bajo el manto de la lucha por los trabajadores. Por todo lo anterior, debe hacerse un llamado a la conciencia de los hombres y mujeres que hacen vida en CVG Carbonorca y a no abandonar los espacios conquistados porque no se trata solo de una empresa sino de garantizar la estabilidad económica de Guayana y de todo el país.