Cuando El Locuaz Anda Calumniando

CELAC

Asistimos al nacimiento de una gran esperanza Latinoamericana y Caribeña porque, hay que insistir en ello, no está Estados Unidos. Sus gobiernos, que a la sazón de las gestas independentistas del subcontinente evolucionaron hacia el engendro bélico industrial que es hoy en día, con la perversa ayuda de lacayos  fue tragándose liderazgos y Pueblos. Esos vende patrias, esos señaladores del paso de las Termópilas, son el más eficaz adminículo de los que se hace el imperio para horadar la unidad.

Ha sido bocado predilecto de un grupo que he denominado “Locuaz”, sus exegesis de venda quitada sobre la “realidad” de la Revolución, acompañado de un vinillo proveniente de lagares opositores, que les desata el guayabo y la verborrea. Pero no es este el hecho importante, pues tales desgarros de vestiduras son comunes en tiempos electorales e incluso pintorescos. No sé por qué pero se me viene a la mente  aquel actor  que hizo su mejor rol pidiendo de rodillas al Líder Comandante que reflexionara ¿Se acuerdan?

El punto es que las casualidades aquí no existen y si ya los medios en manos de la derecha son más que suficientes en su agavillamiento y alevosía hacia todo lo que representa nuestro proceso, los espacios alternativos no terminan de entender que hay que sellar las hendiduras por donde se cuela la pestilencia opositora. No se puede jugar a ser salomónico en esta lucha de clases porque esa permeabilidad o aquiescencia rezuma en los predios allende la talanquera. Se que no tengo toda la verdad en mis manos pero si el Che decía que a los gringos ni un tantico así, creo que los gringos piensan - Fundamento de la doctrina Monroe- desde hace mas de dos siglos que ellos no tienen que pedir un carajo; simplemente se lo cogen.

Entonces no me vengan con vainas sobre equilibrio informativo o libertad de opiniones. Y tampoco aleguen que la crítica es necesaria porque  con esa laxitud no se fomenta ningún proceso dialéctico. Los locuaces han esgrimido que “se nota un cambio en la política interna y externa de Chávez”, que ahora “quiere a los enemigos y odia a los amigos” y otras finuras que buscan crear confusión. Lo señalan directamente de desvirtuar la Revolución y advierten sobre una debacle de proporciones siderales por el viraje  de las políticas del Gobierno. Todo ello como preámbulo a la CELAC.

Ahora, mientras los presidentes, primeros ministros, cancilleres y embajadores de Latinoamérica y el Caribe se reúnen en Caracas, bajo el manto anfictiónico tejido por Bolívar, se lanzan contra su conformación y la auscultan en busca de pajas en ojos que suponen ajenos pues su pitiyankismo además de ideológico, lo asumen somático. Quieren hacer ver las estrategias, los sacrificios y la administración del tiempo histórico que vivimos en una suerte de regresión en la dirección revolucionaria ¡Habrase visto mayor cinismo cuando  ellos son vasallos que empujan el carromato imperial  por Latinoamérica y el Caribe!

La miopía de esta caterva hace juego a la intencional ceguera norteamericana sobre la CELAC. Su ruido es oportuno para los oídos sordos de Washington ante la armonía de los Estados  Americanos sin ellos y sin Canadá. Ocultan que nuestro Presidente dijo que hemos alcanzado un grado de madurez necesario para estar, ahora si, con nuestras diferencias y con nuestras distintas corrientes políticas más unidos que nunca. Y allí sí puede verificarse y plantearse un proceso de discusión franca que permita avanzar en la consolidación de un frente necesario para los retos que tenemos por delante. En mi humilde opinión, nada más y nada menos evitar que el peor imperio de todos los tiempos  destroce el Planeta.

“No te dejes confundir, busca el fondo y su razón; recuerda se ven las caras pero nunca el corazón”

Rubén Blades.

pladel@cantv.net



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Placido R Delgado


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