El Abuso Bancario, Un grano de arena en la conspiración

Cuando pensamos en un Banco lo hacemos en un ente cuya principal función es servir de intermediarios entre los que tienen capacidad de ahorro y los que necesitan créditos, así pues un banco es un ente que teóricamente brinda un servicio público de intermediación financiera, pero debemos recordar que toda empresa tiene un sustrato personal, son personas las que toman decisiones que afectan al público en general, tales personas pertenecen a grupos económicos con intereses muy bien definidos y de muy vieja data, es decir los intereses de grupos que tuvieron otrora el control absoluto de los recursos del país, que acumularon gigantescas ganancias y que encontraron en la Banca una forma eficiente de mantener los capitales obtenidos en constante movimiento y generación de dividendos, en pocas, crudas y llanas palabras es en la Banca Privada donde la Oligarquía Venezolana tiene su punta de lanza.



Dicho lo anterior se hace comprensible la razón del por que en el Salón de coronación del dictador Carmona Estanga gran parte los asientos estuvieran ocupados y reservados a miembros de las juntas directivas de los Bancos, no es de extrañar que la arenga “Te queremos Pedro” haya salido de la garganta de algún emocionado Banquero pletórico de felicidad ante la coronación de un Reyezuelo títere de esos grupos, que cambiaría todos los principios Bolivarianos por una simple y llana frase como piedra angular de su hacer “Mayor ganancia en el menor tiempo posible” que es el motor del capitalismo por antonomasia.



Ahora bien pecaríamos de una “Candidez Revolucionaria” crasa si creyéramos que los Bancos no encontrarán siempre una forma eficiente de burlar impunemente las leyes que los obliguen a asumir compromisos sociales que no sean deducibles de los impuestos o que representen el sacrificio de alguna ganancia, recordemos que para un Banquero, que son los Capitalistas por excelencia, el ganar menos es simplemente perder. A tal efecto somos ingenuos al creer que basta la normativa, sus sanciones y los organismos creados para fiscalizar y velar por su cumplimiento de la misma, para lograr que estos psicópatas sociales entren por el carril de la legalidad, debemos recordar que son entes con una falta absoluta de empatía para con el proceso Socialista, son corporaciones inmortales, con directivos enemigos del proceso Bolivariano, que nunca se harán contestes con la responsabilidad social que acarree un sacrifico de ganancias.

Una prueba de esto la encontramos en el incumplimiento sistemático e impune por parte de todos los Bancos privados de la normativa en materia de Créditos hipotecarios para la adquisición de Vivienda Principal, a través del cual el Gobierno Bolivariano Garantiza el acceso a la Vivienda a todos los Venezolanos, aportando subsidios para quienes lo necesitan y estableciendo tasas sociales para los segmentos de mayor ingreso y posibilidad, es específicamente este segmento donde los Bancos son obligados a otorgar créditos a una tasa de interés mucho menor a la del mercado, una “aberración Socialista” por demás terrible para la mentalidad de un Banquero y mucho mayor es tal aberración para la mentalidad de un Banquero, si se les obliga a la utilización de Recursos propios de la cartera hipotecaria obligatoria, tal y como lo establece y obliga la legislación vigente en la materia.

Los Bancos Privados, han encontrado una forma eficaz de burlar las leyes, a fin trasladar la carga que representa su compromiso Social hacia las instituciones de la Banca Pública, en la práctica se trata de una “vía de hecho” que no deja huellas por escrito y que se lleva a cabo en la cara de las autoridades encargadas de fiscalizarlos para quienes se les hace muy difícil la prueba de la existencia de tal mecanismo debido a que el mismo se lleva a cabo de cara al cliente y de forma verbalizada, en todas las Agencias Bancarias, el mejor de los ejemplos de esta vía de hecho lo encontramos en el Mercantil Banco Universal, los empleados de atención al público de esta institución, ante la presencia de cualquier Ciudadano que precise información sobre los créditos hipotecarios para una familia que aunque su ingreso sea menor a 15 salarios mínimos es superior al limite para que sea acreedora de un subsidio del estado pata adquirir su vivienda principal, en esos casos Mercantil Banco impone verbalmente y a través de instrucciones para sus empleados, un límite máximo de 200.000, 00 Bolívares, a sabiendas de que ese monto en muy pocos casos será una solución para un núcleo familiar con los ingresos mencionados, de esa forma trasladan al candidato que pretende ejercer un derecho Social, mediante una “sugerencia” aparentemente bien intencionada a dirigirse hacia las oficinas de la Banca Pública, mientras ellos eluden de forma grosera su responsabilidad legal.

De esa forma y a través de esa burda “vía de hecho” sin huellas probatorias, y junto a la publicación en su página WEB, que vale decir que es el único medio por donde publicitan el producto que es legalmente obligatorio, Mercantil Banco aparece como cumplidor cabal de la ley ante el público en general y las autoridades de fiscalización, en su sitio de Internet colocan lo que el régimen prestacional para adquisición de vivienda principal establece, es así como reza textualmente:



“El monto máximo a financiar será determinado de conformidad con el ingreso Total Mensual Familiar”



Pero la historia es completamente diferente en el entrenamiento e instrucciones para con su personal, quienes están adiestrados para tal y como se dice en leguaje popular “correr la arruga” hacia la banca pública en la gran mayoría de los casos. Es así como los ciudadanos acostumbrados a creer en la autoridad de quienes nos hacen vulnerables al abuso mediante una publicidad donde aparecen como “impulsoras de mundos” y un apego a la ley, aceptan que ese límite que el Banco Mercantil estableció para ese producto en su política crediticia esta dentro del marco legal y que el Banco Mercantil tiene pleno derecho de hacerlo, auque en la realidad sea una grotesca vía de hecho que menoscaba el derecho a una vivienda de todo un segmento Social, y transforma en letra muerta la legislación Bolivariana hecha con el fin de garantizarlo, eso lo logran de forma impune respondiendo las preguntas del ciudadano pretendiente del crédito con aseveraciones en apariencia lógicas pero carentes de respaldo legal, tales como; “El banco tiene el derecho de hacerlo por tratarse de recursos propios” o “que ya tienen el compromiso cubierto con los préstamos a sus empleados” este último es el argumento utilizado por Banesco.

Ante un Ciudadano que tenga algunas nociones sobre el novísimo régimen prestacional de vivienda y que cuestione dichas afirmaciones con la Gaceta Oficial o una copia de lo que dice su página WEB al respecto en la mano, el empleado de la Agencia recurre a una llamada al departamento de crédito hipotecario del Banco Mercantil, donde existe un personal entrenado para la fabricación de trabas burocráticas y cuestionamientos sobre la capacidad de pago para obtener el fin último que es el traslado del pretendiente hacia los Bancos del Estado, mediante la desmoralización del solicitante potencial y manejando como imposible la aprobación de un crédito acorde a sus ingresos y necesidad, el ciudadano que necesita un crédito para adquisición de su vivienda principal termina por claudicar ante la descalificación y desmoralización de sus pretenciones por parte de los empleados la oficina de Crédito hipotecario (para los cuales hay un incentivo monetario por cada cliente desviado efectivamente hacia la banca pública), a tal efecto al igual que los secretos pormenores de su política crediticia, este departamento no responde a las interrogantes por escrito a fin de no dejar pruebas y causar la desmoralización deseada en el solicitante que se siente vulnerado en sus derechos y burlados ante el silencio y reticencia a contestar las preguntas sobre la legalidad de la situación, los que tengan la desgracia de tener que lidiar con el personal de ese departamento, descubrirán lo que es una carencia total de empatía para con el público, capaz de hacer sentir que cualquier esfuerzo por parte de afectado para hacer valer las leyes será completamente inútil.

Aparte de la intención cierta de no cumplir leyes que acarreen un sacrificio un función de la responsabilidad Social por la “no Ganancia” que representan, existe un matiz de orden político que debemos tomar en cuenta, para estas instituciones el incumplimiento de la ley en este caso además de el factor económico, tiene un componente político, toda familia que se vea beneficiada por las leyes Bolivarianas para salir de una vivienda alquilada o para adquirir una mejor que la actual, es seguramente una familia que apoyará al Gobierno Bolivariano en futuras elecciones, mas aún si percibe el tufo de “Representante de los intereses de los Banqueros” que se siente en el aliento del hoy candidato de la oposición, quien es abiertamente financiado por Bancos como el Mercantil Banco en pro por supuesto de que de darse el caso de un apocalíptico triunfo opositor, y tras tomar el control del Tribunal Supremo de Justicia las leyes que impongan obligaciones que disminuyan sus ganancias sean declaradas inconstitucionales, y retornen las convenientes cuotas balón e intereses sobre intereses.

Otra forma que encontraron los Directivos de Mercantil Banco, para eludir las mencionadas obligaciones, es a través de el otorgamiento de créditos bajo este rubro solo a empleados del mismo Banco, atribuyéndolos ante las autoridades fiscalizadoras como cumplimento de la obligación legal, pero presentándolo ante los empleados como un “Beneficio Contractual” logrando así hacer efectivo un multipropósito: aparecer como cumplidores cabales de la ley, hacen creer a sus empleados que son privilegiados por ser explotados por ellos, amarrándolos de por vida, y otorgar el crédito a alguien que seguirá siendo opositor, caceroleando desde un apartamento que cree que posee gracias a Mercantil Banco, cuando en realidad se lo debe a El Gobierno Bolivariano.

Un humilde consejo para nuestros legisladores en general, cuando se trate de leyes que obligan a compromisos Sociales a entes como Bancos, Empresas globalizadas o grandes empresas nacionales, medios de comunicación etc. Debemos ser extremadamente cuidadosos en la utilización del verbo poder en la tercera persona del singular, la palabra “Podrán” en una ley que lo que pretende es aumentar el rango de ejercicio de un derecho, es un instrumento para que los tecnócratas de un Banco terminen anulándolo, y transformándolo en letra muerta.

El colmo de los colmos es que Mercantil Banco en su informe anual admite un incumplimiento de la cartera obligatoria en los créditos amparados por la ley del deudor hipotecario de un 10 por ciento, y HASTA LA FECHA NINGÚN ORGANISMO DE FISCALIZACIÓN HA MULTADO AL BANCO POR ESTO.

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Enrique Policarpio


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