Imagino que muchas de las personas que hemos dado nuestra opinión sobre el caso de Walter Martínez y más allá sobre el “llamado de atención del comandante” a Mario y a Tascón, ni pertenecemos a “un sector minoritario que conforma una ultraizquierda impenitente y que confunde la contraloría social con el chisme y la maledicencia sin fundamentos” como dice el Sr. NESTOR FRANCIA ni andamos con carta debajo de la manga para jugar a la división haciéndole el juego a la canalla, como dicen otros.
POR MI PARTE QUE LEJOS ESTOY DE ESO, y eso me da moral para disentir constructivamente pero a la vez, la ¿matriz de opinión chavista? me crea la inquietud de que solo se aceptan criticas si la persona tiene una especie de “particular perfil revolucionario” Fuera de eso, ¡CONTRAREVOLUCIONARIO TE DIJE Y CONTRAREVOLUCIONARIO TE QUEDAS!
O SEA, ¡RINDETE QUE ESTA RODEADO!
A mí que me respeten, y a mi parecer en todo lo que ocurrió, indistintamente de si Walter, Tascón y Mario tenían o no razón, es que MUCHA GENTE, QUE COMO YO, QUE LE HA TOCADO IR CON PRUEBAS EN LA MANO A RECLAMAR SUS DERECHOS ANTE UN ORGANISMO OFICIAL Y HA SALIDO CON LAS TABLAS EN LA CABEZA, se identificó con el Sr. Walter, Mario y Tascón.
MI PROPIA EXPERIENCIA:
1.- me roban mi vehículo del estacionamiento de playa Quizandal en Puerto Cabello que es administrado por una Corporación que depende de la Alcaldía Bolivariana de esa ciudad y luego de miles de reclamos el presidente de esa corporación me dice: “Lo que pasa en este país es que aquí no hay ninguna revolución”. Se llama José Gabriel Carrasco y es vox populi en la Alcaldía su improductivo trabajo.
La otra inteligente respuesta que dio fue botar a 12 trabajadores. ¿HAY QUE CALLAR?
2.- soy docente jubilado en el año 2003 y a estas alturas mis prestaciones están represadas en el MINISTERIO DE FINANZAS por FALTA DE RECURSOS.¿Que tal? Si uno se dirige al MINISTERIO DE EDUCACIÓN aparece de la nada un “señor con contactos” que te puede agilizar el trámite, eso sí, comprometiendo parte de tus prestaciones, ¿no creen?. Pregunten en Maracay ¿HAY QUE CALLAR?
No soy de la idea de “apagar la luz, cerrar las ventanas e irnos” como lo expresaron en una llamada al programa “LOS PAPELES DE MANDINGA”, ¡ESO JAMAS!, pero sería conveniente aclararle a una buena parte del colectivo revolucionario el real sentido de la orientación que dio el comandante y que al parecer dejó a mas de uno sin la escalera, ESO SI, SIN ETIQUETAR A NADIE NI HACERLE SENTIR: ¡RÍNDETE QUE ESTAS RODEADO!
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