¿Por qué el comandante Chávez no comandó directamente el asalto al Palacio de Miraflores?
En una entrevista que transmitió Televen, hecha por José Vicente Rangel a Hugo Chávez el 30 de agosto de 1992 y que fue censurada, el propio Chávez responde a aquellas personas con “intereses ocultos”.Así lo dijo: “El teatro de operaciones central dentro del plan Ezequiel Zamora se extendía para el 3 de febrero, 4 de febrero, desde el Campo de Carabobo en los límites de aquel estado con Cojedes hasta Maiquetía, ya en las riberas del Mar Caribe. Es decir, incluía los estados Carabobo, Aragua, Guárico, Miranda y el Distrito Federal.
En todo ese inmenso teatro de operaciones estaban ubicadas bajo mi mando las siguientes unidades: una brigada de infantería en Caracas, la cuarta división de infantería en Maracay de la cual depende la brigada de Paracaidistas, la Brigada Blindada en Valencia además de las unidades de apoyo de artillería y apoyo misilístico en San Juan de Los Morros y Maracay, respectivamente el apoyo aéreo requerido para la operación”. “Toda esta gran unidad organizada en este teatro de operaciones quedó en aquella jornada bajo mi mando. Dentro de la concepción operacional del plan Ezequiel Zamora fue definido el lugar exacto de ubicación del puesto de comando principal, en la Colina de La Planicie donde funciona el Museo Histórico Militar.
De manera tal que nadie que no tenga intereses ocultos puede señalar que mi persona no se hizo presente en el teatro de los acontecimientos como lo han señalado, es más, hay que reconocer que la presencia física de un comandante en un objetivo específico es inconveniente pues pierde la capacidad de control estratégico sobre el área de operaciones. El general Ochoa Antich fue el primero que echó a rodar esa especie de que yo falté al honor militar porque no comandé directamente la toma del Palacio de Miraflores.
Esa misión táctica, de importancia capital hay que reconocerlo, estaba sin embargo asignada a las unidades acantonadas en Caracas como efectivamente lo hicieron”. “De forma tal que yo le recuerdo pues al general Ochoa y a aquellas personas interesadas en esta campaña de desprestigio sobre la acción del 4 de febrero y los hombres que la dirigimos un principio fundamental del arte militar que dice que la táctica nunca puede estar por encima de la estrategia; esa es la realidad. Todas estas campañas de guerra sucia en los laboratorios criollos e importados del régimen se han estrellado sin embargo y se continuarán estrellando contra la fortaleza absoluta que tiene la verdad clara y sencilla así como yo la estoy planteando”.