EL LEGADO DE CHAVEZ ES OBJETIVO MILITAR DEL FASCISMO. Se trata de un plan muy bien elaborado y ampliamente financiado, desde Colombia, (Uribe Velez) y los EEUU (las ONG, fachadas de la CIA). El objetivo es borrar del imaginario popular, todo lo que tenga que ver con el Legado de Hugo Chávez. Por eso la tala de más de 5000 árboles; incendio de más de 300 bosques; destrucción y acoso a universidades del pueblo; asedió y quema de ambulancias y centros de Salud, en especial los CDI, de la misión Barrio Adentro; queman vivos a los perros de la calle, para atacar la Misión Nevado; atacan violentamente a Venezolana de Televisión, en Caracas y Táchira; Destruyen espacios públicos y parques; destruyen escuelas para hacer barricadas; envenenan el agua potable en Mérida, por cierto un estudiante de la ULA y contratista del Estado venezolano.
LA FACHADA DE LA VIOLENCIA, SON LOS ESTUDIANTES. Decimos que los estudiantes son la fachada, porque los verdaderos guarimberos son paramilitares colombianos y gente del hampa común; se trata de gente sin escrúpulos, bien entrenados y pagados, por el partido Voluntad Popular. La gente que en principio apoyo a estos violentos, terminaron siendo víctimas de atracos en sus casas y de violaciones, eso ha ocurrido en Mérida y San Cristóbal.
Sus urbanizaciones terminan siendo secuestradas y para movilizarse, deben pagar vacuna. Se han capturado gente del hampa común, con armamento e implementos de guerra. Además han sido capturados mercenarios de otros países, incluso en una de esas capturas, fue detenido un policía, quién fue escolta de un alto dirigente de la oposición.
LAS CUPULAS DE LA OPOSICIÓN GUARDAN SILENCIO COMPLICE. Lo dijo Julio Borges: “en la oposición el que hable de dialogo con el gobierno, lo destruyen”; imagínense, que le pasará al que condene la violencia y el paramilitarismo. Claro esos mismos dirigentes de la oposición son los que acusan al gobierno de represor y al chavismo de violentos.
Igual ocurre con los rectores de las universidades autónomas, aturde su silencio, ante la destrucción de una universidad del pueblo tachirense; son tan criminales, como los que quemaron la UNEFA, después de robarse lo que pudieron y los medios de la oligarquía, los llama estudiantes. Se trata de un caso único en la historia de Venezuela y del mundo; ni Adolfo Hitler se atrevió a tanto, cerro universidades igual que Pinochet y tantos criminales, que gobernaron en nuestro continente y es solo por eso, que estas cúpulas opositoras pasarán a la historia.