Resulta que por allá en los años 70, el paisano puntapiedrero, Nueva Esparta, ya fallecido Don Gregorio Salazar, conocido cariñosamente como el Sr. Goyo por todo Puerto La Cruz y lugares circunvecinos, decidió darse una “gueltica” por París para visitar a dos de sus hijos que estudiaban en la capital francesa.
Goyo alquiló un piyot (Peugeot) para dar vueltas por París. Como el bicho corcoveó por falta de combustible el conductor, uno de sus hijos, aparcó el carro en una gasolinera. Eran las siete de la mañana. El paisano ñero, bajando el vidrio, le dijo cariñosamente al bombero ¡ponlo full! Éste, enfurecido, le insultó: “Mire señor es muy temprano para burlarse de la gente y además usted está muy viejo para la gracia”. Goyo, por supuesto, no entendió un carajo, mas sus hijos sí que, por cierto, se desternillaban de la risa: ”Mira mijo ¿qué fue lo que engrinchó a este señor? Y el hijo le respondió no papá. Lo que pasa que aquí en París y en toda Europa no existe la palabra full en las gasolineras; porque llenar un tanque de estos carros cuesta una fortuna. Aquí se echa gasolina de a tres, cuatro, cinco litros. Eso es en nuestro país que cualquiera pone full el carro por tres bolívares”.” Pues entonces me haces el favor de decirle a este señor que yo soy venezolano y que tengo plata para ponerlo full. Goyo pagó como Bs.300 y le dio su buena propina al el bombero que, por lo demás, le pidió disculpas encarecidamente.
En algunos países hay conductores que apagan el carro cuando van en bajada para que la gasolina rinda. Y otros que hacen una vaca para pagar el combustible del carro del vecino y utilizarlo como transporte colectivo. En invierno muchos campesinos “mueren de frío” porque no tiene combustible para encender sus estufas. En Madrid hay quienes aparcaban sus carros en el estacionamiento del metro para ir al trabajo y regresar al hogar y así ahorrar gasolina para el paseo del fin de semana. En cambio. Venezuela es el único país del mundo que la gente conversa y conversa dando vueltas en el carro por toda la ciudad. Es común la muletilla: “Vente y conversamos eso en el carro dando vueltas”. Y también es un viejo decir que en Venezuela una botellita de agua mineral es más cara que un litro de gasolina. Bueno es tan barata la gasolina en nuestro país que a uno le da pena cuando pone el tanque full con menos de cinco bolívares que casi siempre el vuelto y algo más es la propina del bombero. La gente está consciente que la gasolina está súper barata y que es una cuestión de equidad aumentarla mucho más si ese incremento es para financiar obras sociales.