Cuando tenga una hija le diré que su cuerpo le pertenece. No le diré lo que me dijeron las monjas del colegio ¨a los hombres no le gustan las frutas machucadas niñas, háganse respetar¨
Cuando tenga una hija le diré que es hermosa tal y como es. Se lo recordare todos los días para contrarrestar el inevitable efecto del bombardeo mediático y sus culos perfectos.
Cuando tenga una hija, le diré que fue mi decisión tenerla y que ella tiene derecho a decidir, porque tener hijos no es un mandato ni una obligación.
Cuando tenga una hija le diré que nació completa. Que no necesita una ¨media naranja¨ ni un ¨príncipe azul¨ para ser feliz. Que aquel que te ama no te maltrata, ni te grita, ni te pega y que es mejor estar sola que tener un imbécil al lado (sin excepciones).
Porque al final mi querida niña, no estamos solas. Somos esta media humanidad cansada de hacer el mismo trabajo por menos salario, por tener doble jornada sin reconocimiento, por poseer menos del 1% de la riqueza mundial.
Así que levantate y lucha. Nadie lo hará por nosotras
