Hubiésemos querido despedirnos de este año con otro tema más acorde, pero dadas las circunstancias y los álgidos acontecimiento que se suceden en el mundo, no podemos soslayar, lo que entendemos es el deber de quienes desde adolescentes empezamos a ver en los planteamientos de Marx, Lenín y Engels, el antídoto para enfrentar la peor amenaza contra la humanidad, el capitalismo salvaje y deshumanizado, cuyo eje mundial es Estados Unidos de Norteamérica, como operador orgánico del proyecto hegemónico.
Pese las marchas y contramarchas que vienen confrontando los gobiernos de avanzada en el continente, las experiencias vividas nos indican que surgen expectativas en el horizonte que la derrota de la tesis de Francis Fukuyama, continúa en plena vigencia y cada día adquiere mayor fortaleza, como fuerte indicativo de que la construcción de un mundo mejor es posible y si no está a la vuelta del camino, depende de nosotros como ciudadanos que aceleremos su proceso, para apurar el desenlace fatal de un sistema, que frente a la tiranía del 1% de millonarios contra el 99% de menores recursos en la población mundial, se hace insostenible a todas luces y su desmoronamiento va a ser peor que el de la Unión Soviética.
El eje fundamental de este perverso sistema, está condenado a la implosión. Estados Unidos de Norteamérica, es en la actualidad una palmera seca, en medio de la pradera en llamas, que en apariencia no la toca el fuego, pero que como ocurre, la llama va por dentro abrazando la fibra hasta consumir la corteza. El ensayo de Obama en la Casa Blanca, como elemento catalizador del creciente descontento de afroamericanos, latinos y esa variopinta minoría que poco a poco se convierte en mayoría, fracasó. El engaño de "El negro" presidente, lo acabó el propio Obama con su exagerada conducta de Tio Tom y ahí vino el castigo de los electores. Se fueron a los extremos y eligieron un Furher, cuya ejecutoria como operador del imperio es un enigma y que como pudiera acelerar la amenaza contra el mundo, pudiera también agudizar, las contradicciones internas de ese putrefacto sistema y acelerar su estrepitosa caída. La orgullosa "Unión", pudiera devenir en un archipiélago de naciones, al liberarse del yugo imperial, los partidos que subyacen bajo la opresión de la bota capitalista.
Por eso sin ser optimistas en extremo, sino mas bien ponderados y conscientes de todas las amenazas que en contra de la revolución existen en el mundo, nos atrevemos a dar por sentado que los huracanes que sacuden a Argentina, Paraguay, Uruguay, Brasil, Venezuela, Ecuador y en menor cuantía a Bolivia y Nicaragua, diríamos parafraseando a Gramsci, son estertores propios de un proceso, donde la criatura que está por nacer no termina de alumbrar y la que está por morir se resiste. Pero evidentemente la insurgencia al escenario político de la nueva criatura que está por nacer y la salida de ese escenario de la moribunda, son hechos inexorables.
Por eso vemos, como en España, Grecia, Portugal, Italia, Ucrania y demás países dominados por el capitalismo representado en Troika europea, sus pueblos ya no resisten más la bota alemana sobre sus espaldas y están dando la pelea. La África profunda, al igual, que América Latina, continúa en píe de lucha y cada día se hace mas palpable la decisión de ser libre, con el empuje y valentía de su pueblo. En el Medio Oriente, el imperio está perdiendo la guerra al fracasar la invasión programada con mercenarios en contra de la soberanía de Siria y su pueblo. El triunfo de Siria, es el seguro contra la desestabilización que planea el sionismo contra la revolución islámica en Irán y la fortaleza de Irán y Siria juntos; son el cerrojo, que obstaculiza el camino de la conspiración imperial, contra China y Rusia, las dos grandes potencias de contrapeso frente al malandro planetario.
En los casos de Argentina, Brasil y Paraguay, ya la situación está tocando fondo y los Alcapone, que están al frente de esas hermanas repúblicas, tienen sus días contados. Escupieron hacía el firmamento y les ocurrió lo obvio, por gravedad el salivazo les cayó en la cara.
Cuba ensaya un nuevo avance en su accionar revolucionario y pese a las malas intensiones del "Sheriff solitario", la cultura y la lealtad del pueblo cubano, vencerá las tentaciones. El Caribe, cada día que pasa acera más su conciencia y se aleja del tutelaje imperial. Bolivia, Ecuador, Nicaragua y Uruguay, se mantienen en sus trincheras anticapitalistas y la resurrección de las raíces aborígenes, son la mayor garantía del avance de estos pueblos hacía la liberación definitiva, para beneficio de la humanidad y en particular de la Patria Grande. No hay duda que pese a la existencia de los Caín, que abrazan el tratado capitalista en contra de la región, ALBA, UNASUR, CELAC, Petrocaribe y demás instrumentos integracionista, más temprano que tarde tendrán el premio de la victoria, porque los pueblos de Colombia, Perú y Chile se están cansando de ser "objetos de vitrina" y darán al traste con los oligarcas que desde las alturas del poder los sojuzgan.
La República Bolivariana de Venezuela, nuestra amada patria, hemos querido dejarla premeditadamente como broche para el cierre, porque ciertamente, quienes hemos militado de toda la vida en el campo revolucionario y hemos vivido tantas experiencias, que no derrotas, tenemos la esperanza de que quienes tienen en sus manos los mandos del proceso revolucionario, vuelvan al camino que nos trazó el Comandante eterno Hugo Rafael Chávez Frías, se liberen de la borrachera del poder y con el regreso a las "Catacumbas del Pueblo", encuentren de nuevo el camino que nos conduzca, con la unidad, la humildad, la rectificación sin renunciar a principios y apoyados en el muro de la sabiduría popular de nuestras comunidades urbanas, campesinas y aborígenes, movimientos sociales, culturales y profesionales que diariamente ofrecen su cooperación, podamos toparnos con un nuevo año de luchas, batallas y victorias.
