La Geografía criminal se deriva de los estudios vinculados con la geografía humana, física y el soporte cartográfico. Las actividades criminales y delictivas requieren de un espacio físico para su ejecución, dando paso al estudio geográfico, el cual es apoyado en otras disciplina científicas vinculada con el comportamiento humano. Cuando se inicia el análisis espacial de la criminalidad surgen aportes que van desde lo estadístico hasta lo relacionado con el urbanismo, mapear los lugares de recurrencia delictiva favorece a la planificación de las acciones disuasivas y represivas, según la necesidad. Conocer el espacio y como este, se articula al comportamiento registrado desde el punto de vista social, económico, urbano entre otros, resulta esencial para la interpretación de cualquiera situación criminal.
Los estudios encaminados en el aspecto Humano de la geografía, involucran el campo de la geografía urbana, la cual nos habla de la morfología del diseño urbano y la dinámica que en esta desarrolla. En este sentido el diseño arquitectónico resulta una variable de estudio que centra su atención en los urbanismos y barriadas, estos dos elementos marcan una diferenciación entre la distribución espacial de las áreas donde "residen los delincuentes" y aquellas donde delinquen, esta matriz de opinión es la más usada en el ámbito policial, la cual aunada con el amarillismo comunicacional estigmatizan las barriadas como zonas de alta peligrosidad. Por otro lado Geografía de la población aglutina visiones sociales, estadísticas y económicas, direccionando como producto grandes aportes interpretativos del comportamiento poblacional. La regionalización económica especifica las potencialidades productivas y como esta sirve de atracción a la población para la generación de nuevos asentamientos, que de cesar las líneas de producción industrial termina por ser el mejor ejemplo de la novela Oficina número 1 y Casas muertas de Miguel Otero Silva. Cuando una actividad industrial se detiene se inicia un cumulo de problemas socio económicos que lo vemos muchas veces reflejados en los índices de criminalidad. Los urbanismo deben contar con un plan de mantenimiento urbano que minimicen zonas de riesgos, promulgando espacios abiertos seguros y de prácticas colectivas en lo deportivo y cultural.
Los estudios encaminados por la Geografía Física involucran todo los aspectos bióticos y abióticos de los espacios, es así que su interpretación coadyuvara de manera determinante en los análisis espacial – delictivo, desde la geomorfología, hidrología, clima entre otros convergen en una buena conclusión de tesis criminal son condiciones que pueden favorecer o desfavorecer la acción delictiva.
Por último, concretar partes de estos análisis en una representación cartográfica inclina la posibilidad de iniciar un proceso de estudio de la localización y temporalidad delincuencial, cabe señalar que nuevas tecnologías como los Sistemas de Información Geográfica indican el rumbo de acciones con un mínimo de error, llegando a modelar escenarios no deseados y sus posibles soluciones en tiempo CuasiReal.
Finalizo en decir una definición que dice …la delincuencia, así como las actuaciones político –policiales que se toman en esta área, cuenta con factores tan importante s como el medio territorial en el que se desarrolla su actividad así como su localización geográfica, y es precisamente el estudio de la localización espacial del crimen y sus relaciones con el entorno directo las que no acercara a una mejor comprensión de lo que es la Geografía Criminal… (Alfredo Llorente del Río)