Observando las tendencias políticas de lo publicado en los últimos meses o quizás desde que el Presidente Hugo Chávez anunciara a Nicolás Maduro como su legítimo sucesor aquel 08/12/1012, me ha generado una peculiar suspicacia, tanto, que me impulsa a proponer que los aporreadores abramos un debate al respecto.
Empiezo yo. Aporrea surge y no hay que negarlo, como iniciativa necesaria para los sectores revolucionarios, bolivarianos, patrióticos, chavistas o sencillamente quienes no compartían la parcialidad descarada y perversa que aplicaron y siguen aplicando los distintos medios electrónicos de la derecha nacional e internacional, sabiendo de antemano la intención y los intereses nada venezolanos que estos concibieron prácticamente desde la llegada de Chávez al gobierno, siendo así, Aporrea se convirtió en poco tiempo en el medio digital que de alguna manera importante, contrarrestaría esa opinión descalificadora hacia el chavismo. Gracias a ella, junto a Rebelión, Abrebrecha y otras tantas nacionales e internacionales, se empezaron a publicar y leer opiniones de centenares de hombres y mujeres de todo el planeta y de todos los niveles intelectuales, fundamentalmente a favor de la revolución bolivariana.
Esta página, como se caracterizó y debe ser así, en publicar artículos relativos a las virtudes, triunfos y aciertos del chavismo en el gobierno y en el proceso bolivariano sin descartar las opiniones críticas al sectarismo, los vicios y errores en tono nivel del gobierno y partidos que lo acompañan, entre estos opinadores críticos me encuentro yo.
Ahora, qué pasó después de la desaparición física del Comandante y la llegada de Nicolás a la presidencia, bueno, se desataron los demonios ocultos lanzando la consigna: "Maduro no es Chávez". Mientras saltaban los alacranes que rodearon a Chávez denunciados por el Gral. Rojas Müller, situación a la que el mismo Comandante, le corresponderá a la historia referir las causas, no les prestó mayor atención. De allí empezaron a gotear algunos personeros importantes del chavismo que iban quedando fuera del gobierno, señalando bravuconamente que al no ser Chávez, entonces el gobierno de Maduro es malo. Cabe destacar esta incógnita: será que Chávez en el estado avanzado de su enfermedad y al momento de venir de Cuba aquel 12/Oct-12 a hablar por última vez con el pueblo venezolano y más allá de nuestras fronteras, estaba delirando y no sabía lo que hacía; sería, o más bien es, una tremenda canallada de parte de quienes consideran esta hipótesis, pues, el Comandante sí conoció suficientemente el talante de Nicolás Maduro, por ello, con el mismo sentido de responsabilidad que le valió reconocimiento como Líder Supremo de la Patria, le dio tamaña responsabilidad. Una referencia como ejemplo de confianza; no sé si pueda haber alguien que dude que la política de gobierno más exitosa del Comandante fue la internacional, revisemos los logros y allí lo encontraremos los resultados; quién fue su ejecutor directo, nada más que el autobusero, Nicolás Maduro.
Volviendo a las críticas necesarias como parte de la búsqueda de corrección, no descarto que la corrupción y el burocratismo en sus distintas modalidades y alcances, siguen siendo los peores males de este proceso; sin embargo, achacárselas a Maduro es una infamia bestial, sobre todo viniendo de quienes estuvieron en el gobierno con Chávez. Me atrevo a especular que el Comandante, conociendo de estos viejos y nuevos vicios y sus beneficiarios, creyó que si solamente los denunciaba como él mismo lo hizo en mensajes constantes hacia el pueblo, era suficiente por ahora, pues, la correlación de corrientes internas para dar la pelea no les eran favorables y más bien podían dar oportunidad a las fuerzas de la derecha nacional e internacional, en tal sentido se conformó con neutralizarlas esperando mejores condiciones, lamentablemente nunca les llegaron.
Vuelvo con Nicolás Maduro. El ahora presidente, indudablemente conociendo la situación interna en el gobierno heredado, le toca lidiar con todos los vicios presentes e intactos pero en peores condiciones de las existentes ante Chávez. Nicolás no podía darse el lujo de dar la pelea interna comenzando su gobierno, pues, la derecha en su esquema oportunista se dijo: "nada, éste no es Chávez, ahora si lo tumbamos" y se vinieron con todo y juntos. Arrecian la guerra no convencional en lo económico, cultural, criminal y fundamentalmente mediática.
Es en esta última donde aparecen con más ahínco las tendencias internas que dentro del chavismo con Chávez, jugaron a la táctica para mantenerse dentro en espera de una oportunidad; ahora sin Chávez, afloran como críticos varios pintos con múltiples facetas y posturas ideológicas asumiéndose más chavistas que Nicolás, y que Chávez. No les importa que sus criterios u opiniones sean exaltados y/o coincidan con los enemigos de siempre, les recomiendo que revisen el artículo de Juan Carlos Monedero: "11 tesis sobre Venezuela y una conclusión escarmentada", sí publicado en Aporrea.
Aporrea, ahora pereciendo o convertida en voz de la disidencia o del chavismo crítico, alternativo o no sé qué, dentro de esa misma coincidencia o imparcialidad que tiene Germán Ferrer en Globovisión, anuncia o reseña noticias que netamente favorecen a la derecha fascista, así de fácil como si ellos, pobrecitos no tuvieran manera ni medios para ser escuchados o vistos. Esta vez no se trata de un gazapo como el que denuncié en relación a un supuesto enfrentamiento entre la GNB y el CICPC, en Los Teques, esta vez se trata de la publicación de un comunicado completo de la MUD, sí, de la mud, con un subtítulo de "Responsabiliza a la dictadura de Maduro por convertir al país en una amenaza regional" y títulado: Hoy domingo la MUD emite comunicado de rechazo a "la amenaza militar de cualquier potencia extranjera"
En este comunicado, como habrán de leer los distintos aporreadores que lo abran, entre otras cosas da la sensación de ser elaborado por el Pentágono o la CIA, seguro que sí tienen sus manos y el financiamiento metidos, pues, además de empezar con: "La MUD rechaza la intervención cubana" no aparece para nada algo que se refiera al imperio, Trump, USA, por el contrario, utilizando el mismo señalamiento y lenguaje fascista de una declaración de guerra contra Nicolás Maduro, que al decir lo que representa esto, en una declaración de guerra contra la Patria, y lamentablemente Aporrea, lo publica como una noticia desacatada.
Entonces, amigos de Aporrea, se definen o prefieren seguir jugando a lo táctico entre lo cerrado y lo abierto o entre lo legal y lo clandestino utilizando todos los medios de lucha.
Recordemos todos, en la lucha política contra el imperialismo, la imparcialidad no existe, solo es una forma de complicidad. Literatura de esto hay bastante.
