En Venezuela aplicaron los elementos de Guerra psicológica, guerra mediática y cibernética para acabar con la revolución bolivariana y la paz de los venezolanos.
La guerra psicológica, guerra mediática y cibernética son formas de conflicto que se están realizando actualmente en el mundo y usados con más relevancia en los países que no están bajo el dominio imperial, en el caso de Venezuela tiene soberanía y especialmente avance de la tecnología.
La guerra psicológica en nuestro país antes de las elecciones presidenciales, sabemos que la utilización de tácticas y técnicas psicológicas para influir en las actitudes, emociones, creencias y comportamientos de individuos, para generar un caos el cual ha tomado difusión de desinformación, propagandas, manipulación emocional, entre otros métodos. El objetivo de la guerra psicológica es debilitar al pueblo venezolano para socavar su moral, generar desconfianza, confusión, desmoralización y otros.
La guerra mediática ha sido centrada en el uso de los medios de comunicación, como la prensa, la televisión, la radio y las redes sociales, que han influido en la opinión pública y crear la percepción de un conflicto en nuestra población. En este tipo de guerra, la oposición buscan controlar la narrativa, difundir propagandas, desacreditar a la revolución bolivariana y ganar el apoyo de un sector de la población. La guerra mediática puede ser utilizada como complemento de la guerra psicológica para amplificar su impacto.
La guerra cibernética es a través de el uso de tecnologías informáticas y de redes para llevar a cabo operaciones ofensivas y defensivas en el ciberespacio. Esto puede incluir ciberataques, espionaje cibernético, sabotaje de infraestructuras críticas, desinformación en línea, entre otros. Los ciberataques pueden tener como objetivo la interrupción de servicios, el robo de información confidencial, la manipulación de datos, o la desestabilización de sistemas informáticos.
En la actualidad, estos tipos de guerra se han vuelto más comunes y sofisticados, ya que los avances tecnológicos han facilitado su ejecución y han ampliado su alcance. Es importante para los gobiernos, organizaciones y la sociedad en general estar alerta y preparados para hacer frente a estos desafíos en un entorno cada vez más digitalizado y conectado.
En el proceso electoral venezolano que se realizó el 28 de julio, se evidencia que los sistemas de telecomunicaciones estaban caídos en un momento no teníamos comunicación, el presidente del CNE, el poder electoral venezolano informa que el sistema estaba sufriendo ataques cibernéticos permanentes, el cual estaban tratando de alterar y robar la información electoral.
El presidente Nicolás Maduro también anuncia en una rueda de prensa el ataque cibernético permanente al sistema de comunicación y a diferentes plataformas tanto del CNE y del estado, además solicito a los gobiernos de china y Rusia, realizar un peritaje de alto nivel y así verificar de donde eran dirigido estos ataques, debemos resaltar que el gobierno bolivariano de Venezuela, cuenta con un sistema de monitoreo para proteger nuestros servidores, la cual a permitido que no hagan daño permanente a las web institucionales, sin embargo los ciber criminales están preparados para cometer este tipo de delitos, por eso es necesario las alianzas con potencias tecnológicas, para ir mejorando la protección a plataformas de tecnología y garantizar la soberanía en todos los aspectos.
Es evidente, que el pueblo venezolano heredo gran variedad de mestizajes de nuestros ancestros y no ha sido manipulado con los modelos de guerra psicológica y mediática, que si ha funcionado en otras naciones, sin embargo un sector de la población está disociado y manipulado por las redes sociales que lo han llevado a cometer delitos, después de la elección presidencial, son dirigidos por lideres negativos y disociados que quieren gobernar y entregar nuestra nación al imperio norteamericano.
