Quizás poca gente recuerda a dos artistas del Brasil que nos mostraron una cara diferente a la cara y a las nalgas que nos muestra Scheila Carvahlo, me refiero a los Indios Tabajaras. Scheila es un monumento nacional al mestizaje y los Tabajara un monumento musical a la integración. Sus dos guitarras recorrieron la América Latina y sirvieron para hacer sonar con maestría música de todos los rincones de la Patria. No contento con esto esa música fue llevada a sitios tan terremotos (o algo así...) como el Japón.
Es de los Indios Tabajaras ese instrumental que se titula Ternura. Yo apenas aprendí el punteaito en guitarra, cuatro, shamisen u otro instrumento de cuerdas. Pero en estos días me acuerdo de esa ternura cada vez que oigo o leo a los revolucionarios pluralistas, demócratas, arrozconmango, en su empeño por lograr un dialogo con la centro-derecha y con la derecha. Son una preciosura de gente, su terquedad es de una ternura bebe
Gerber, y son los que mas sufren cuando las cosas se van poniendo chiquitas para ese micro-cosmos de la pequeño-burguesía problematizada.
Cansa tener que recordarle a toda esta gente -que no son muchos pero hacen bulla- nombres, lugares y fechas. Me ahorro los números: Zapata, Sandino, Arbenz, Bosch, Goulart, Allende, Torrijos, Sigo, Quieresquesiga, Sinobastasigo.
Bejuco, picadas, etcetera, que algo queda...