En una entrevista realida al director de Justicia y Culto por Radio Nacional de Venezuela; entre muchas otras cosas que dijo; manifestó que el crecimiento no católico era de gran importancia. En Venezuela el crecimiento de las Iglesias no católicas; especialmente la evangélica es muy significativo, esto gracias al desperatr del pueblo tocante a deslastrarse de un religión impuesta, como la católica, que en su esencia es colonialista en latinoamerica. Todos sabemos como se conquistó esta parte del mundo bajo la espada y la cruz. Como se masacró a todo una generación de cientos de millones de personas. Ese clero católico que ha estado siempre unida al imperialismo mundial para explotar la fe de la gente, destruir la moral y cercenar el camino a la salvación eterna brindada por un Jesucristo vivo; y no ese Dios que el Clero como el Vaticano aún mantienen muerto en una cruz o en en pañales todos los diciembre; temen presentar a un Dios personal, vivo, vigente, sobrenatural y muy activo en el mundo porque se les acabaría su farza.
No solo eso ha logrado este clero en decenios; se le ha venido en gana destruir todo el proceso revolucionario en nuestra nación; ha sido evidente como participaron del golpe de estado; de cómo han sido accerrimos enemigos de la revolución ya que un Gobierno le hizo frente y le trancó el camino de dicha y placer que han tenido en todo el periodo -y que democrático- esto con la anuencia del gobierno Norteamericano y de Inglaterra, apoyado por gobernantes y empresarios -y que protestantes evangélicos- para seguir montando su bota sobre el cuello de la gente.
Estas últimas declaraciones dadas por el CEV dicen mucho y manifiestan una clara posición de que el Clero católico, a espalda del noble pueblo católico; persiste en tumbar al gobierno. Es hora de que los diputados del proceso comiencen a sacar a la luz toda la vagabundería de este nefasto liderazgo, tomar el ejemplo del periodista Ricardo Duran por Radio Nacional de Venezuela en su programa "La Noticia del Día" denunciando a ese farsante de moseñor Porras.. Hay que sacarle los trapitos al sol; que se muestre la inmensa corrupción que por años los gobiernos de turno han tapado, que se diga sobre los casos de homesexualismo, lascivia, abortos y tanta corruptela. Que no tengan miedo; hay que desenmascararlos; que el pueblo conozca la fuerte alianza que este clero y mucho de sus dirigentes tienen con el ocultismo, la brujería y la masonería; que la gente conozca el verdadero lado oscuro de la oposición y de cómo hay fuerza espirituales de maldad en ese pesimo liderazgo que por siglos ha tenido sometido al pueblo venezolano.
Invito a que el pueblo organizado se manifiesten radicalmente; castiguemoslo; hagamosle una campaña de no ir a sus misas; que por un mes en 4 domingos nadie asista a sus misas y veran como tiemblan; para que respeten al soberano, para que dejen de usar el pulpito como una trinchera de la oposición. Invito a que los cristiano que aman a Dios se manifiesten en contra de ese liderazgo; que toda Iglesia o templo que es usado como bastión del fascismo sea denunciado y abandonado; dejemosle solos a ver qué hacen y qué dicen.
Esas 4 semanas en ves de ir a una misa vayan a un servicio evangélico; el más cercano a su casa; ahora si en esa Iglesia evangélica igualmente se este usando el pulpito para sermonear en contra del proceso igualmente no asistan. Esta revolución hay que defenderla; desenmascarar aquellos que con cara de piedad están haciendo morcillas para el diablo como bien lo decía mi madre cuando de pequeño nos veía santos en misa y diablos en casa.
Hay un pueblo católico que respetar, y así como hemos flanqueado a la oposición en todos los rincones: PDVSA, Sindicatos, Instituciones, Ministerios, Medios, etc. comencemos pues a barrerlos de los templos, a pedir por sacerdotes honestos, integros, de Dios y sobre todo sacerdotes que se casen porque religión que prohibe al hombre de su derecho natural hay que ponerle la lupa porque no estén promociionando el homosexualismo sacro; antecedentes tenemos en los EE.UU: y en otras naciones.
Con todo respeto a los católicos he escrito este artículo para que hagan uso de su fuerza y derecho para que de una vez por todas nos deslastremos de un liderazgo que abona para una guerra civil. A los 18 años renuncié al Católicismo, y en y desde 1983 hasta hoy conocí a un Dios vivo, justo, bueno, que nos ama y se opone al mal en todas sus manifestaciones, dejar el catolicismo no hace perder a nadie; Dios no salva por religión, él solo pide a cada ser humano reconocer su Señorío sobre toda la vida; es todo. El Clero no lo enseña porque son los primeros que no lo viven.
