1° de agosto de 2008 / El Grupo Santander confirmó que mantiene negociaciones con el Gobierno venezolano para vender su filial, el Banco de Venezuela, una de las principales entidades del país.
En un comunicado difundido este viernes, la entidad presidida por Emilio Botín reconoció que tenía previsto vender el banco a un inversor privado venezolano, para lo que se alcanzaron "determinados compromisos" sin llegar a acordar la compraventa.
Fue entonces cuando el banco español conoció el interés del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, de nacionalizar la filial del Santander en el país latinoamericano, que ha dado lugar a que en estos momentos haya conversaciones entre ambas partes.
Fuentes del mercado valoran la filial venezolana del Santander entre 1.200 y 1.900 millones de dólares, aunque la entidad española no ha confirmado estas cifras.
Por su parte, la vicepresidenta del Gobierno español, María Teresa Fernández de la Vega, consideró muy probable que se alcance en breve un acuerdo, al tiempo que aseguró que no hay ni va a haber ningún tipo de intervención por parte del Ejecutivo de su país.
En su opinión, se trata de una negociación completamente respetuosa y normal, sin ningún tipo de problemas.
Según los resultados del primer semestre del Grupo Santander, el Banco de Venezuela tiene una cuota de 11,8 por ciento en créditos y de 10,7 por ciento en depósitos.
Para el 30 de junio, la filial contaba con 285 oficinas y tres millones de clientes y, según datos de la sección sindical de la central UGT del Santander, trabajaban en ella 4 mil 565 empleados, de los que 58 por ciento eran mujeres y 42 por ciento hombres.
El Banco de Venezuela, cuyo accionariado de 80 por ciento fue adquirido por el Santander en 1996, obtuvo un beneficio neto atribuido de 109 millones de euros hasta junio, 29 por ciento más que en el mismo periodo de 2007.