17 de agosto de 2009.- Este día conocerá las primeras denuncias de supuestas violaciones a los
derechos humanos, como consecuencia del golpe de Estado, ocurrido el
pasado 28 de junio, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos
(CIDH), cuya presidenta tiene previsto llegar hoy al país.
La delegación de la CIDH la integran 12 miembros, 11 de los cuales
llegaron a Honduras entre el viernes y ayer domingo, no así su
presidenta, la venezolana Luz Patricia Mejía Guerra, quien llegará este
día a la capital.
Los miembros de la comisión que ya están en Honduras son: el primer
vicepresidente de la CIDH, Víctor Abramovich; el segundo vicepresidente
y Relator para Honduras, Felipe González; el Comisionado Paolo Carozza
y el secretario ejecutivo, Santiago Cantón.
A los antes indicados, también los acompañan Isabel Madariaga, Víctor
Madrigal, Débora Benchoam, María Isabero Rovero, Milagro Noli, Pablo
Sandino Martínez, Gloria Gordon y Gloria Molina, quienes son miembros
de la Secretaría Ejecutiva.
La comitiva que viene a observar, a recibir pruebas y a escuchar a
testimonios, no brindó declaración alguna a su llegada y se limitó a
pedir disculpas prometiendo que al final de las investigaciones darán
una conferencia de prensa.
INTINERARIO
Desde hoy, y hasta el viernes de la presente semana, la CIDH
establecerá su sede temporal en el hotel Intercontinental de
Tegucigalpa, donde recibirá denuncias sobre supuestas violaciones a los
derechos humanos ocurridas en el contexto del golpe de Estado contra el
depuesto presidente Manuel Zelaya Rosales.
Asimismo, la Comisión Interamericana se trasladará a diferentes
regiones del país, las cuales no ha especificado y al final de su
estadía presentará las observaciones preliminares de su visita.
Como consecuencia del golpe de Estado, diferentes sectores y
organizaciones de la sociedad como el Comité de Familiares de Detenidos
y Desaparecidos en Honduras (COFADEH) y el Comité para la Defensa de
los Derechos Humanos en Honduras (CODEH), han denunciado múltiples
violaciones a los derechos humanos de los seguidores de Zelaya Rosales,
especialmente de parte de la Policía y la Fuerza Ejército.
La inconformidad también la han manifestado una serie de comunicadores
sociales, especialmente de San Pedro Sula y esta capital, donde
sufrieron agresiones físicas de parte de los uniformados.
En un comunicado emitido recientemente por la CIDH en Washington, donde
está la sede de este organismo internacional, sus autoridades
manifestaron que “la suspensión de Honduras del ejercicio de su derecho
de participación en la Organización de los Estados Americanos (OEA),
decidida el 4 de julio de 2009 por la Asamblea General Extraordinaria
de la OEA, no modifica las obligaciones contraídas por el Estado en la
Convención Americana y otros tratados interamericanos de derechos
humanos”.
NO REPRESALIAS
La visita de la CIDH se desarrollará de acuerdo a lo
establecido en la Convención Americana sobre Derechos Humanos y en su
Reglamento, que establecen que se debe conceder a la Comisión todas las
facilidades necesarias para llevar a cabo su misión y no tomar
represalias de ningún orden en contra de las personas o entidades que
cooperen con ella mediante informaciones o testimonios.