Luego de que la semana pasada el Colegio de Periodistas de Honduras organizara una movilización con la participación de periodistas de las grandes corporaciones medíáticas del país, misma que fue acompañada y resguardada por miembros de la Policía Nacional, un grupo de mujeres periodistas independientes decidió convocar a un manifestación pacifica con la intención de llegar hasta la Casa de Gobierno y allí hacer sentir su protesta al titular del régimen, Porfirio Lobo, ante la ola criminal en el país y que la semana pasada cobró la vida de la periodista Luz Marina Paz.
Cuando el grupo de mujeres, acompañadas de algunos varones del gremio, se aproximaban a los predios presidenciales, fueron fuertemente reprimidas por los miembros de la Guardia de Honor Presidencial, los que con una cantidad desproporcionada de bombas lacrimógenas atacaron y disolvieron la manifestación pacifica.
El malestar fue general en las manifestantes, quienes calificaron la acción de intolerante y responsabilizaron a Porfirio Lobo por la desproporcionada represión.
Los afectados denunciaron que al llegar a inmediaciones del Poder Ejecutivo, militares de la Guardia de Honor Presidencial (GHP) sin mediar palabra, comenzaron a reprimirlos lanzando gases lacrimógenos y disparos de armas de grueso calibre.
Tras la agresión emprendida por guardias de la Casa de Gobierno, el Secretario de Comunicaciones, Miguel Ángel Bonilla, salió al lugar de la represión a ofrecer disculpas a los afectados por la paliza que les propinaron.
“No sabíamos que habían llegado a este lugar a protestar”, expresó el funcionario.
El periodista del canal Globo TV, Edgardo Castro, por su parte, condenó el ataque que padecieron y dijo que esta es “la intolerancia del gobierno de Porfirio Lobo Sosa... este es un gobierno fallido.”
La coordinadora del Comité de Mujeres por la Paz, “Visitación Padilla”, Gladis Lanza, dejó en evidencia que “este gobierno no está dispuesto a esclarecer los crímenes.”
Cabe destacar que el viernes anterior, peridistas de los medios de comunicación tradicionales realizaron una marcha pidiendo que se les proteja ante las últimas “agresiones” que han recibido.
A este grupo de comunicadores no se les reprimió a pesar que llegaron al Poder Ejecutivo a protestar.