Tegucigalpa, 25 Nov ABN.- El régimen de facto hondureño continuó los preparativos para celebrar elecciones el próximo domingo, en un estado de emergencia, con el país militarizado y una legitimidad cuestionada por la comunidad internacional.
Un total de 16 mil efectivos del ejército, 14 mil policías y cinco mil 500 reservistas serán desplegados en todo el país antes, durante y después de los comicios refirió un cable de Prensa Latina.
'El aparato montado para la contienda del domingo nunca se había visto en vísperas de una votación aquí', advirtió el periódico Tiempo, y denunció que a ello se añade la declaratoria del estado de emergencia nacional.
El régimen de Roberto Micheletti adquirió en Estados Unidos un camión blindado, por valor de 12 millones de dólares, para reprimir las protestas populares, además de 10 mil granadas de mano y cinco mil proyectiles de gas lacrimógeno.
La compra de estos pertrechos, unida a la orden de despejar los hospitales, reafirma que nos enfrentamos a terribles presagios en vísperas de las elecciones espurias del 29 de noviembre, señaló el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos.
Los comicios tendrán lugar bajo el régimen que usurpó el poder tras el cuartelazo militar del 28 de junio pasado contra el presidente constitucional Manuel Zelaya.
Cinco candidatos aspiran a la presidencia: Porfirio Lobo, del Partido Nacional; Elvin Santos, del Liberal; Felícito Ávila, de la Democracia Cristiana; Bernard Martínez, de Innovación y Unidad Socialdemócrata; y César Ham, de Unificación Democrática.
Mientras, el candidato independiente, Carlos H. Reyes, renunció a participar en la farsa para no legalizar el golpe de Estado.
'No podemos participar en elecciones mientras no se restituya al presidente Zelaya', dijo Reyes.
Los comicios, considerados como los más cuestionados aquí, son rechazados por una gran parte de la comunidad internacional por la falta de garantías para su realización y tanto la ONU como la OEA anunciaron que no enviarán observadores.
Naciones Unidas no está envuelta de ninguna manera en las elecciones hondureñas del próximo fin de semana, dijo Farhan Haq, portavoz oficial del secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon.
Sólo Estados Unidos, Panamá y Perú anunciaron su aval a los comicios, los cuales son desconocidos por la mayoría de los gobiernos latinoamericanos que ven en el cuartelazo una peligrosa amenaza para toda la región.
En una carta al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, el jefe de Estado legítimo de Honduras advirtió que la contienda en las actuales condiciones constituye una vergüenza histórica para su país y una infamia para los pueblos democráticos de América.