Luego de una jornada de planificación y análisis de la situación nacional y sus perspectivas, el Frente de Resistencia el pasado fin de semana, aprobó varias líneas de trabajo, en las que se destacan la organización de la Resistencia a nivel nacional, el fortalecimiento de las bases en los lugares en los que la Resistencia ya exista y las asambleas permanentes. A su vez, la Resistencia continuará con manifestaciones pacíficas y eventos populares en barrios y colonias de las ciudades
Barahona comentó también que se ha redefinido la actividad de la Resistencia por la falta de institucionalidad en el país y la violación permanente de los derechos de la población. La agenda ahora contendrá también los problemas sociales y también los aspectos políticos que han abordado desde el golpe de estado. Así mismo, la Resistencia se plantea convertirse en un Frente Amplio en que se aglutinen todas las fuerzas políticas y sociales en contra del golpe de estado, proponiendo de ahora la construcción y la toma del poder.
El Frente Nacional desconoce las elecciones del pasado 29 de noviembre y por tanto también al presidente electo Porfirio Lobo, al que consideran la continuación del golpe de estado. “el proceso electoral se llevó acabo bajo un régimen golpista, ilegal e inmoral, acompañado de una represión brutal impuesta por la dictadura. El presidente electo en estas elecciones es el presidente de la minorías donde está representada la oligarquía hondureña y no será más que la continuación del golpe de estado”, aseguró el dirigente en la entrevista.
“la situación política, económica y social empeorará, además si tomamos en cuenta que fueron electos por una minoría, eso da como resultado un gobierno débil que intentará compensarse con represión. Además el Partido Nacional siempre ha sido represivo que ya cuenta con conocidos personajes que han actuado violetamente en contra del pueblo”, afirmó.
Juan Barahona también se desempeña como presidente de la
Federación Unitaria de Trabajadores de Honduras y opina que la situación de los
derechos laborales no es prometedora. “para los trabajadores y trabajadoras de
Honduras, los organizados y los no organizados, a partir del 27 de enero será
más difícil, tanto en el sector privado como en el Estado, la crisis económica
afectará la estabilidad laboral y habrán despidos masivos. El presupuesto estatal
será insuficiente para pagar salarios y el sectarismo y el clientelismo
político desplazaran muchos puestos de trabajo, la única que podrá hacerle frente a esta
situación es la Resistencia”.