Por William Serafino
José, con respecto al evento del día de ayer, donde el presidente juramentó la directiva de las empresas básicas, ¿cuál es la lectura que le das a esa acción?
Vemos con beneplácito la juramentación de la directiva de las empresas básicas de Guayana, donde los mismos trabajadores a partir de hoy tomarán las riendas de tan importantes empresas. Quiero expresarte, que con el evento de ayer, se cumplieron a cabalidad los sueños de los y las trabajadoras que, después de tantas luchas, por fin pueden dirigir las empresas bajo efectivo Control Obrero. Con dicha juramentación se abre la histórica oportunidad de que los mismos trabajadores planifiquen y direccionen la producción de las empresas básica, entendiendo la obligación histórica de los mismos en el levantamiento de las distintas corporaciones, en búsqueda constante de convertirlas en empresas eficientes y que aporten al desarrollo nacional.
Es importante destacar, que la juramentación de las empresas básicas Venalum, Alcasa y Sidor representa, de forma tangible, la participación participativa y protagónica de los y las trabajadores en la dirección de las empresas, siendo nosotros mismos los responsables del desarrollo de las distintas corporaciones. También es importante puntualizar que tanto el proyecto de Control Obrero como los camaradas que asumieron la dirección de las empresas, salieron del desarrollo de las discusiones que se dieron en las Mesas Guayana Socialista donde, después de un intenso debate, se avanzo en distintas conclusiones políticas ligadas a la participación activa de las y los trabajadores en las empresas básicas. Esta concreción se debe a la participación activa y protagónica de todo el conjunto de las y los trabajadores en todas las corporaciones.
Ya lograda esta lucha tan importante, ¿cuáles son las perspectivas de la clase trabajadora de aquí en adelante?
Hemos conquistado un objetivo fundamental, pero, debemos dar una lucha que nos reclama el pueblo venezolano: levantar las empresas básicas y convertirlas en corporaciones eficientes, al servicio del pueblo venezolano. Para la consecución de este objetivo debemos, irrenunciablemente, acabar con la sectorización a la cual nos sometía la antigua trasnacional que dirigía las empresas; para acabar con esto es necesario unir las empresas que producen materias primas (Ferrominera) y aquellas que procesan dicho producto (Sidor), apuntalando hacia la unificación de esfuerzos para levantar las empresas básicas. Esto nos permitirá fortalecernos como trabajadores que ejercen el control obrero y, en consecuencia, darle una mayor eficiencia a las empresas básicas.
Debemos involucrar a todas las corporaciones en un solo objetivo: poner a producir de forma eficaz y eficiente todo el conjunto de las empresas básicas.
José, sabemos que cuando se nacionalizó Sidor, la comisión de transición tuvo que luchar férreamente contra la estructura burocrática de la empresa, ¿cuál será la política principal para derrotar esta estructura aún existente en las empresas básicas?
Reconocemos que la comisión de transición cometió algunos errores. Los mismos giraron en torno a la nacionalización; luego de dicha acción la comisión no tocó algunos cargos estratégicos para la empresa (abastecimiento, fiscalización, etc.) y, por consiguiente, se mantuvieron en dichos cargos algunos trabajadores que distaban de ser revolucionarios. Ahora, con la nueva directiva, los trabajadores sabemos que aún subsiste la misma estructura burocrática en las empresas, lo cual entorpece el desarrollo productivo de las empresas, por esta razón, es importantísimo, acabar y demoler dicha estructura para de esta forma contribuir al desarrollo de las empresas básicas y que sirva de palanca fundamental para el desarrollo nacional.
Nuestras acciones van dirigidas hacia la adaptación de la ley de licitación pública, la cual mantiene una estructura burocrática que no contribuye con el desarrollo de las corporaciones. La capacidad de compra de las empresas básicas es gigantesca y depende de la rapidez en la adquisición para no entorpecer el proceso productivo, por esa razón es necesario modificar dicha ley para agilizar la compra y traslados de repuesto para agilizar la producción. Los trabajadores tenemos la responsabilidad histórica de acabar con la estructura capitalista-burocrática de las empresas de Guayana, fundamental para el desarrollo endógeno del país.
José, ¿deseas enviar algún mensaje hacia la clase trabajadora y al pueblo en general?
Le decimos a toda la clase trabajadora venezolana y al pueblo en general que, luego de esta victoria tan importante, estamos dispuestos, conscientes de nuestra obligación histórica que nos impone este proceso revolucionario, a colocar las empresas básicas de Guayana como lo que son, empresas productivas y eficientes, de carácter socialista, siempre al servicio del pueblo venezolano y al desarrollo general del país.