Entre los interlocutores del
fundador de WikiLeaks estaban Marisa Holmes y David Graeber de Ocupa
Nueva York, Alexa O’Brien de Ocupa Nueva York y del Día de la Ira de
Estados Unidos y Aaron Peters y Naomi Colvin de Ocupa Londres.
La nueva edición de Diálogo con Julian Assange se emitirá en RT el martes, 29 de mayo, a las 11:30 GMT.
La nueva edición de Diálogo con Julian Assange se emitirá en RT el martes, 29 de mayo, a las 11:30 GMT.
Los orígenes del movimiento Ocupa
David Graeber, de Ocupa Nueva York, señala que “hay un tipo de agitación global”. El activista afirma que el movimiento de protestas
que estremeció Estados Unidos empezó en Túnez. De allí se extendió por
países del Mediterráneo como Grecia y España. “Iniciamos nuestro
movimiento no aceptando el orden establecido y con el deseo de crear uno
nuevo”, explica David.
Por su parte, su compañera de movimiento Alexa O’Brien apunta que
actualmente existe una crisis política global que se debe a que las
“instituciones políticas no funcionan más”.
A su vez, Aaron Peters, de Ocupa Londres, añade que hoy en día se
reconoce que “los resultados de la política pública no están ocurriendo a
nivel nacional y los creadores de la política no son realmente aquellos
que están en los parlamentos nacionales, están en otro lado y aquellos
que dictan la política no son los responsables de ninguna forma, no son
los representantes democráticos”. Peters afirma que se trata de un
fenómeno global.
Al mismo tiempo, hace hincapié en el papel de la crisis económica
mundial en las recientes protestas sociales. Según él, estas “nacen de
la queja y de la sensación de ser agraviados”. Opina que estos
movimientos serían “simplemente imposibles” sin la crisis económica.
“Occidente está en declive”
Según Peters, presenciamos la transformación más grande de la economía
política global. Debido a la deuda occidental los fondos fluyen al
sudeste asiático. “Occidente está en declive”, asegura el activista, que
señala que este hecho es obvio para todo el mundo, excepto para los
políticos occidentales.
“Ocupa es un movimiento galvanizador”
Naomi Colvin, de Ocupa Londres, destaca la importancia de dar un
ejemplo en el movimiento de protestas, de inspirar a la gente para que
Ocupa se extienda a nivel global. “Lo que pasa en Londres es imposible
sin el ejemplo de lo que pasa en España. Realmente es el momento en el
que todo se junta”, señala la activista.
"Hay diferentes flujos identificables que se unen en Ocupa, y Ocupa es
casi un movimiento galvanizador", señala Naomi.
La violencia y el movimiento Ocupa
Marisa Holmes, de Ocupa Nueva York, apunta que el movimiento optó por
“la no violencia”. Cuenta que ocuparon una plaza para poder tener una
asamblea general y empezaron a hablar sobre el mundo en el que estamos
viviendo y sobre las estructuras que lo gobiernan. No obstante, indica
que “por estar ahí y ejercer de forma directa el proceso democrático”
representaban una amenaza a la que la Policía “tuvo que responder”.
Por su parte, su compañero David Graeber está seguro de que “no hay
nada que aterrorice tanto al Gobierno de Estados Unidos como la amenaza
de un estallido democrático” en ese país. El activista no duda de que
las autoridades “reaccionarán de forma violenta”.
Además de la violencia, la Policía ha usado diferentes tipos de
provocaciones para socavar las protestas. Así, por ejemplo, “en algún
momento la Policía trajo presos recién liberados y los llevó en
autobuses al parque y les dijo, 'eh, aquí hay comida gratis”, cuenta
David. “Hubo un intento muy directo de tratar de subvertirnos y nos
dieron la posibilidad de elegir: o empezar a invadirnos o convertirnos
en un modelo de bienestar social en el que nosotros nos ocupáramos de
esas personas”, señala.
Internet, un importante instrumento de comunicación para las protestas sociales
Los activistas entrevistados por Assange coinciden en la importancia
que tiene la cobertura de las protestas en la Red global y en los
medios. Al mismo tiempo destacan que Ocupa “se estaba autodocumentando”
todo el tiempo. “Si no fuese por las grabaciones en directo en Internet y
por nuestros equipos mediáticos sociales no habríamos llegado hasta los
principales medios de comunicación”, afirma Marisa Holmes.