16-01-14.-La Contraloría General de la República de Colombia, decidió abrir dos nuevas investigaciones contra la minera estadounidense Drummond por la indebida liquidación de regalías y la ampliación del muelle de cargue de las barcazas. Desde hace más de un año ha estado la carbonera ha estado en el ojo del huracán por cuenta de sus irregularidades en el cumplimiento de las normas medio ambientales.
Según los datos del ente de control, el muelle de carga de la Drummond pasó de 150 a 589 metros y el de embarcaciones menores de 32 a 50 metros, lo que habría ocasionado un detrimento superior a 113 mil millones de pesos, el equivalente a más seis millones 600 mil dólares.
La segunda investigación tiene que ver con la indebida liquidación de regalías. En este caso hubo un presunto daño fiscal cercano a 20 mil millones de dólares porque el cargue de carbón se efectuó en barcazas de mayor capacidad a las establecidas para el cálculo de la contraprestación.
“Se había comprometido a un máximo de 70 mil toneladas, pero la última auditoría nuestra estableció que tiene buques de 160 mil toneladas, lo que produce un daño fiscal por 20 mil millones de dólares”, señaló Sandra Morelli, Contralora general.
El pasado 2 de enero, el periodista y abogado Alejandro Arias publicó nuevas fotografías con las que demostró que a pesar de las leyes refrendadas en Colombia, la firma continuaba transportando carbón en barcazas.
La carbonera estadounidense ha estado en el ojo del huracán por cuenta de sus irregularidades en el cumplimiento de las normas medio ambientales. El procedimiento que utilizaba para cargar sus buques implicaba llevar el carbón que la minera extrae desde un puerto en Ciénaga, cerca de Santa Marta, hasta unos buques ubicados a ocho kilómetros de la playa.
Ello producía contaminación no sólo en el aire, por las partículas que se liberan, sino la pérdida del mineral que cae al mar, como lo sostuvo en su momento una investigación de la Contraloría. Por eso el Gobierno decidió frenar la operación de esa empresa.
Una mancha negra que se extendió este martes en la mañana por las aguas del mar Caribe, en cercanías de los puertos carboneros que están ubicados en el municipio de Ciénaga de Santa Marta, Colombia, sorprendió a turistas y pescadores, que denunciaron la contaminación.
A través de un comunicado, la carbonera Drummond negó su responsabilidad y afirmó que "suspendió todas sus operaciones en el Puerto desde el 13 de enero" y consideró "que esta situación (la mancha) no puede ser producto de nuestras actividades".
