Quito, 11 May. ABN.- Ecuador rechazó este miércoles el informe sobre la
situación política de este país de la Organización de Estados Americanos
(OEA) y descartó convertirse en un 'conejillo de indias' de la
institución hemisférica, según reporta Prensa Latina.
Tras escuchar los planteamientos de la misión de la OEA que visitó Quito
en abril último, el embajador Mario Alemán, cuestionó en Washington las
observaciones reflejadas en el informe y refutó la intromisión de esa
instancia en los asuntos internos de esta nación.
"Mi país se opone a estar sujeto a cualquier forma de control, bajo una
supuesta resolución de 'tutoría de la democracia' que se pretendería
aplicar por pedido de esa comisión", subrayó Alemán ante el Consejo
Permanente de ese organismo regional.
Recordó que Ecuador no es el único territorio del hemisferio occidental
con fragilidad en sus instituciones democráticas, y a pesar de los
problemas, cuenta con un Gobierno que ha recuperado la legalidad en todo
el territorio.
"El escenario nacional se ha normalizado en su totalidad, se respira un
aire de absoluta libertad en la nación y se han regularizado en forma
total las situaciones tanto política, como institucional", agregó.
El diplomático impugnó asimismo las observaciones realizadas por el
secretario general adjunto de la OEA, el estadounidense Luigi Einaudi, y
llamó a que tales consideraciones se ajusten a la Carta imperante en esa
organización.
Rememoró que en la reunión del Consejo de abril pasado el Ecuador invitó
a una misión al país para que comprobara en el terreno la situación
nacional, pero no se acordó que existiera un seguimiento por parte de
ese organismo.
"Los representantes de esa comitiva no tienen derecho además a brindar
recomendaciones. Esta es una facultad del Consejo Permanente", aclaró
Alemán.
El embajador reiteró que el documento presentado promueve la intromisión
en los asuntos internos del Ecuador al reclamar que la nación proceda a
conformar de manera transitoria una corte de justicia, lo cual, viola
la Constitución.
Para conocimiento de los embajadores miembros del Consejo, aseveró que
el objetivo del Gobierno y el Congreso ecuatorianos es contar con una
Corte Suprema de Justicia independiente de los partidos políticos y de
los grupos de poder económicos.
Alemán objetó de forma tajante la recomendación referente a que a su
país se le podría aplicar una especie de control a larga distancia y
recordó que vive en un Estado soberano, donde existe un pueblo dispuesto
a defender su libertad y no necesita ser vigilado desde lejos.
"El Ecuador no es un minusválido, no es un país cuya soberanía está
sometida a ningún grupo o persona y su pueblo la sabrá defender a toda
costa", concluyó.