Hacia una Bolivia Viable con Dignidad Parte VI. Paro indefinido a partir del lunes 23 de mayo. El solo anuncio de una nueva medida de protesta radical alteña generó un estado de psicosis en ciudadanos, operadores económicos y funcionarios estatales y de la influyente cooperación internacional, y esto ocurre por cuestiones alimenticias como por los efectos que esta movilización alteña pudiera tener.
EL ALTO (22-5-05).- Los ciudadanos y dirigentes sociales de El Alto preparaban este domingo 22 las radicales medidas del cuarto movimiento político-social cuyas principales exigencias son la nacionalización del gas y el petróleo, el cierre del Parlamento y la renuncia del asediado Presidente Carlos Mesa.
Esas medidas comenzarán con un “paro cívico-vecinal indefinido” cuyo antecedente son tres medidas similares con resultados sorprendentes y con efectos poco esperados pues en una de esas oportunidades –octubre de 2003– un Presidente Constitucional tuvo que renunciar de manera forzada e incluso huir precipitadamente del país.
Las motivaciones de la nueva medida que comienza este lunes 23, radican en que los sucesivos administradores de Estado, desde Victor Paz (en 1985) hasta Carlos Mesa (2005) no dieron respuesta a las exigencias de sectores sociales postergados, muchos de ellos marginados de instancias estatales porque no ejercen ciudadanía (indígenas y campesinos indocumentados).
La cuestionada Ley de Hidrocarburos, los “vaivenes” del Congreso en el tratamiento de esa polémica norma, las indecisiones y actitud discursivo-dictatorial del Presidente Mesa así como la agravada crisis económica plasmada en la “falta de circulante” generaron que la dirigencia social alteña asumiera medidas que la población boliviana ya experimentó en octubre de 2003 y enero de 2005.
PSICOSIS SOCIO-POLITICA
Un primer efecto del solo anuncio de las medidas alteñas es la psicosis generada en sectores económico-productivos, gubernamentales así como en los propios ciudadanos. Es común escuchar en conversaciones cotidianas, en oficinas estatales, privadas y de la influyente cooperación internacional, comentarios, personales y por teléfono, acerca del efecto que el paro alteño tendrá en la economía y en la política bolivianas.
Comerciantes que trasladan productos de una región a otra, empresarios de servicios que deben pasar obligatoriamente por El Alto así como temerosos funcionarios bajos, medios y altos de organismos estatales, privados y de influyentes organismos internacionales bilaterales y multilaterales preguntaban acerca de los pormenores del paro y de sus consecuencias.
Otro factor de preocupación es la alimentación de familias así como en lugares públicos (mercados, restaurantes, hoteles, hospitales y otros) donde a diario se consume considerable cantidad de alimentos perecederos y enlatados.
PRO Y CONTRA EL PARO ALTEÑO
La nueva medida alteña comienza este lunes 23 en medio de la incertidumbre generada por otras cuestiones vinculadas a las exigencias de la exigencia alteña. Uno de ellas es el demorado juicio de responsabilidades en contra del ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada y sus colaboradores por las 73 muertes y casi 500 personas afectadas de manera directa por heridas de bala, balín o gases lacrimógenos disparados por policías y militares entre septiembre y octubre de 2003.
Si bien la Fiscalía General de la República emitió el jueves 19 su imputación formal (acusación oficial, un año y 9 meses después) esta actuación pasó por situaciones llamativas por lo ridículas como los “errores procedimentales” de acusar al ex Mandatario y sus ayudantes por violaciones sexuales, poner en duda la norma con la que será procesado o declarar “no habidos” a los ex ministros Carlos Sánchez Berzaín y Jorge Berindoague, el primero de los cuales apareció en una red televisiva afín al anterior gobierno, solicitando y aleando que la justicia debe llegar.
Otro factor de incertidumbre fue agregado por el Presidente Carlos Mesa, quien demostró sus dotes de mandatario indeciso al alegar primero una inexistente “observación conceptual” a la Ley de Hidrocarburos para luego no promulgarla y dejar este trámite al mirista Hormando Vaca Diez, titular del Congreso Nacional, aunque luego Mesa apareció en la televisión para anunciar su poco creíble “Plan Bolivia Productiva y Solidaria”.
Finalmente, la situación económica de Bolivia comenzó a mostrar signos de agravamiento al conocerse que buena parte del “circulante” proviene de las “remesas” que ciudadanos bolivianos que dejaron el país ante la falta de oportunidad (“exiliados político-económicos”) envían desde Argentina, Estados Unidos, España, Brasil y otros países americanos y europeos.