El Memorial al fallecido presidente Juscelino Kubitschek y el Museo del Indio amanecieron hoy con letreros de "Fuera Bush asesino", "Yankees go home" y "Fuera americanos, fuera yankes", en un anticipo de los actos de protesta que se inician mañana en esta y en otras ciudades brasileñas.
Impulsadas por organizaciones sindicales, juveniles y movimientos sociales, las protestas ocurrirán en por lo menos ocho ciudades del país, en las que esta semana se realizaron diversas reuniones y asambleas plenarias para ultimar preparativos.
Las manifestaciones bajo el lema "Fuera Bush" comenzarán el viernes 4, víspera de la llegada del visitante, en Brasilia, Río de Janeiro, Salvador Belem y en el estado de Mato Grosso do Sul, fronterizo con Paraguay, donde Estados Unidos proyecta instalar una base militar.
Según el Diario Vermelho, la denuncia de la presencia norteamericana en ese país estará en el centro de las protestas, junto con la condena a la ocupación de Afganistán e Iraq, la solidaridad con el pueblo palestino y la recogida de firmas de condena a Bush por crímenes contra la humanidad.
En los objetivos de las manifestaciones también figura "la defensa de los cinco patriotas cubanos presos injustamente en Estados Unidos" y la lucha contra la extradición del ex sacerdote colombiano Oliverio Medino, preso en dependencias de la Policía Federal por solicitud de Colombia.
Los organizadores decidieron que las protestas comiencen el viernes en Mato Grosso do Sul, con la consigna "Bush, saque las patas de Paraguay", por el peligro que entraña la presencia militar de Estados Unidos allí, tanto para ese país como para Brasil y otros vecinos.
En Brasilia, las manifestaciones se iniciarán ese mismo día con una marcha hasta la embajada estadounidense y continuarán el sábado y el domingo.
En Sao Paulo, la mayor ciudad de Brasil, la Coordinación de los Movimientos Sociales y la Campaña de Lucha contra el ALCA preparan un gran acto el sábado 5, con una caminata entre dos símbolos del hegemonismo norteamericano: el Bank of Boston y McDonalds.
Ese mismo día se realizará la marcha contra Bush en Fortaleza, mientras la de Belo Horizonte tendrá lugar el lunes 7, cuando ya el visitante habrá abandonado el país.
Junto a los preparativos del encuentro oficial y de las manifestaciones contra el indeseado visitante, la Policía Federal y las Fuerzas Armadas están montando el mayor esquema de seguridad visto en Brasilia, según la apreciación de la prensa local.
Entre las medidas figuran la declaración del espacio aéreo de la capital como zona de exclusión mientras dure la visita, barridos antibomba en los sitios por donde pasará Bush, uso de perros olfateadores traídos por Bush y la movilización de cientos de soldados y agentes policiales. yd