Cerca de 100 políticos e intelectuales y unas 44 organizaciones sindicales y civiles de México se manifestaron en un desplegado contra la campaña que la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión mexicana (CIRT) está haciendo en favor de Radio Caracas Televisión (RCTV), presentando como una "expropiación", la decisión del gobierno venezolano de no renovar la concesión de la emisora con el fin de convertirla en un canal público.
La decisión del gobierno venezolano, dicen, es mal vista por quienes están acostumbrados a aprovecharse de los bienes públicos como si fueran patrimonio propio.
Los firmantes señalan que la decisión de no renovar la concesión pública a una televisora es un acto legal, al que un gobierno tiene derecho para ceder el espacio radioeléctrico a organismos al servicio de la ciudadanía.
El documento agrega que la campaña injerencista de empresarios de radio y televisión mexicanos forma parte de una estrategia de la ultraderecha, que recientemente se ha caracterizado por actitudes en contra del proceso emancipador venezolano y de apoyo al gobierno estadunidense de George W. Bush.
Entre las personalidades firmantes figuran Pablo González Casanova, Samuel Ruiz, Gustavo Iruegas, Miguel Concha Malo, Magdalena Gómez, Héctor Díaz-Polanco y Claudia Gómez Haro