Ya Ameliach fue destituido en agosto del 2009 por una serie de
irregularidades pero ante la incapacidad del gobierno, con sus
famosos
enroques como única alternativa, lo restituyeron en octubre del 2010
para que siguiera haciendo de las suyas.
Está claro que desde un principio los ofrecimientos del proyecto
Petrocasa comenzaron mal. Primero, no es autónomo pues depende de
insumos extranjeros caros y nada fáciles de conseguir, segundo
porque
el costo real por unidad es mucho mayor al informado desde el
inicio y
no es por la inflación, dieron un monto ficticio desde un principio;
adicionalmente falta inversión para el mantenimiento de la planta.
Las
casas ofrecidas en el modelo inicial no se están fabricando, los
techos
propuestos no están siendo colocados ya que en su lugar están
colocando
acerolit.
Sobre la creación de otras plantas, el reciente arranque de la
planta
de Biruaca en el estado Apure lo hace con la mezcla enviada desde la
sede de Guacara porque no fue diseñada para prepara allí la mezcla.
La
misma planta de Guacara nunca ha cumplido ni con la mitad de las
unidades a fabricar diariamente pero la excusa siempre es culpar a
los
trabajadores, sobre todo cada vez que denuncian la incompetencia de
la
dirección de la planta. Habitualmente estos luchadores son
despedidos o
intimidados para que renuncien. La dirección nunca ha aceptado
discutir
un convenio colectivo. Los métodos son traer nuevos trabajadores que
no
conocen la política antiobrera del patrono mientras otros son
hombres
de su confianza para contrarrestar la lucha de los trabajadores por
sus
derechos laborales. La retaliación contra Mercedes Martin provino de
una diferencia con los directivos de producción y RR II (Recursos
Inhumanos) ante una situación insegura producto de las lluvias en
las
aéreas de trabajo. Estos sitios estaban inundados y aún así el
patrono
quería que se iniciara la producción de inmediato. Esta situación
esta
descrita en un acta de un delegado de seguridad y salud laboral.
Casos
como este donde se violan las condiciones mínimas para ejecutar las
operaciones, tampoco son reconocidos por el patrono. Sólo lo hacen
con
una delegada de seguridad laboral que representa precisamente a RRII
y
apoya toda la actividad arbitraria de los patronos.
Toda la estrategia de Ameliach es doblegar a los trabajadores
combativos y montar una directiva sindical patronal, vale decir,
vendida a la política antiobrera de Petrocasa, o mejor aún, con un
consejo de trabajadores escogido a dedo por parte de Ameliach y
Homer.
Luego seguirán encubriendo su incapacidad para alcanzar las metas de
producción que han ofrecido responsabilizando y culpando a los
trabajadores de la misma. Los derechos laborales son pisoteados
diariamente. Además, los directivos de Petrocasa son privilegiados
de
la nómina de Pequiven, mientras los trabajadores siguen su condición
como contratados donde ni la ley del trabajo se cumple.
virmontry@gmail.com
POR EL REENGANCHE INMEDIATO DE MERCEDES MARTIN POR RESPETO AL
FUERO SINDICAL
POR EL RECONOCIIENTO DE LA DIRECTIVA SINDICAL ACTUAL CLASISTA Y
AUTÓNOMA DE LAS IMPOSICIONES PATRONALES.
POR LA APROBACION DE UN CONVENIO COLECTIVO.
SÓLO EL CONTROL OBRERO AUTENTICO HARÁ PRODUCIR LA PLANTA Y
RESPONDER ASÍ A LOS VENEZOLANOS SIN VIVIENDA.