El 31 de Diciembre pasado, apenas me enteré del indignante anuncio realizado por el Presidente Chávez sobre la amnistía para los culpables del Sabotaje Petrolero, la peor tragedia económica y social sufrida por nuestro país en la historia contemporánea; Amnistía para los culpables de las masacres de Puente Llaguno, para los militares de la Plaza Altamira, Para los que celebraban gritando con brazos en alto la firma del decreto que terminó con la esperanza de muchos venezolanos y quienes redactaron el mismo; ese día 31 de diciembre escribí una nota titulada ¿Qué le Pasa Señor Presidente?, Cuatro días después de la mencionada nota, Sigo sin Entender, No tiene ni pies ni cabeza.
Sigo sin entender porque no importa si son pocos los que están siendo juzgados o los que están detenidos cumpliendo una condena por los delitos que usted amnistía, No importa si el que esta preso es una sola persona, y los demás están tomando whisky en una playa de Miami. El hecho es que como le explica usted a la madre, al padre, al hijo, a la esposa de una de las víctimas de los sucesos a los que usted se refiere en la amnistía, que debe "Pasar la Página", que se olvide de lo que sucedió, que se olvide del Tiro que lo dejó paralítico, de las quemaduras sufridas por un incendio con gasolina durante el paro petrolero, de la muerte de un niño que no llegó a tiempo al hospital por no tener combustible, que se olvide de todo porque usted esta invitando a la oposición a un debate político serio, cuando esta gente en 9 años de su gobierno no ha realizado una propuesta coherente ni constructiva para nuestro país.
He podido ver que a través de este medio han salidos varios defensores de esa medida, algunos hablan de disciplina, otros hasta nos han insultado por tener un punto de vista diferente al respecto de esta ley. Pero es que señores, no podemos creer que esta sea una acción estratégica del ciudadano Presidente Chávez para desarticular una matriz de opinión internacional en cuanto a la presencia de "políticos presos y perseguidos" en nuestro país…. Y si es así, bien errada esta la estrategia, y ya tiene un costo humano, político y psicológico bien alto, porque ¿quien se come el cuento que con esta medida los oposicionistas bajaran la guardia e iniciaran un debate político serio? Internacionalmente nadie se va a comer ese cuento.
Para muestra un botón: La matriz de opinión que rodea al mundo, a pesar de los esfuerzos del estado para desmontarla, que indica que en Venezuela no hay libertad de opinión; Todos sabemos que aquí lo que existe es un libertinaje de expresión del cuál las mismas instituciones encargadas de regular esta actividad son cómplices por no realizar su función regulatoria, por no sancionar. Caso Globovisión por ejemplo.
Esta Ley de Amnistía es un terrible antecedente para lo poco que hay de justicia en nuestro país. Ya Veremos llegar aviones repletos de prófugos (o sus abogados) acusados de los distintos delitos amnistiados por usted, y que en manos de jueces corruptos, saldrán campantes a pasear nuevamente por estas calles venezolanas, persiguiendo al pueblo chavista y desafiantes así como el día en que González González desafió a Tarek William Saab en la Asamblea Nacional y le dijo que si el hubiese comandado los alzamientos militares, el (Tarek) no estaría en esa silla para contarlo.
Recuerde al Fiscal Anderson, usted cree que por una estrategia política, se puede pisotear la memoria y a los familiares de este hombre que se jugó la vida acusando a los culpables de los delitos que usted menciona en su ley de amnistía. Ya no hay vuelta atrás, Me parece que ha vuelto a matar a Danilo y a cada una de las victimas del sabotaje petrolero y golpe de estado de Abril de 2002.
Señor Presidente Lo he acompañado siempre, no le he faltado ninguna vez, pero lamento no poder acompañarlo en esta, su decisión.
rubenpe@yahoo.com