El vicepresidente de Comunicación, Cultura y Turismo, Freddy Ñáñez, afirmó que la actual crisis económica mundial, calificada como una «guerra económica», es consecuencia de una mentalidad elitista y supremacista que prioriza los intereses de Estados Unidos, ignorando las repercusiones para el resto del mundo.
En su programa, Cable a tierra, señaló que esta situación ya había sido anticipada y advertida por los gobiernos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro.
Explicó que la crisis es producto de la inestabilidad del sistema capitalista y las sanciones impuestas por Estados Unidos, las cuales han afectado a diversas naciones.
Destacó que Venezuela ha enfrentado este escenario gracias a la fortaleza de sus instituciones, su proyecto de país independiente y su riqueza cultural. Además, subrayó la importancia de diversificar la economía y reducir la dependencia del petróleo como parte de un modelo que priorice los intereses nacionales.
Resaltó que esta crisis resultado de una guerra de aranceles representa una oportunidad para replantear el modelo económico mundial. «Es el momento de construir un nuevo orden global que priorice la soberanía y el desarrollo de cada nación, lejos de la dominación de los intereses estadounidenses», afirmó.
Concluyó que la actual coyuntura global debe ser aprovechada para promover un sistema más equitativo y sostenible, que responda a las necesidades de los pueblos y no a los intereses de las élites económicas.